El tráiler de la película dirigida por Leonard Zelig se puede ver en YouTube
Roberto Manrique contra la muerte en el cine
Rubén es un migrante ecuatoriano, fotógrafo, que reside en Nueva York, Estados Unidos, de una forma exitosa y alejada de compromisos hasta que tiene que enfrentarse a la idea de morir joven. Le diagnostican un cáncer pancreático terminal que deja sus días contados: 3 meses si no se acoge a un tratamiento o un año y medio si decide entrar al quirófano. La decisión no tiene que ver con los hospitales y así inicia el conflicto que lo desnudará en Translúcido, la última película de Leonard Zelig.
“Es un proyecto intimista —dice el actor Roberto Manrique, quien le da voz y rostro a Rubén—, sin duda, el conflicto que vive el personaje, aún no consumido por la enfermedad, implicó adentrarme en cuestionamientos sobre una vida cuyo límite se acerca o a la que le queda una sola opción de extenderse”.
Durante el rodaje del filme —que duró 11 días en Estados Unidos, 7 en Ecuador—, la consultora de producción Dianne Gray fue quien se comunicaba, a diario, con director y protagonista para consolidar la interpretación de un hombre condenado a morir.
Además de ese recurso —un diálogo intenso entre productores que incluía experiencias personales que perfilaran las emociones ficticias de la película—, Manrique dice que, al término de cada día de rodaje, cuando la claqueta daba su último ¡clack! y el equipo se iba a descansar para una nueva jornada, “yo me quedaba en ese mundo paralelo, entre Rubén y Roberto, habitando la casa de Nueva York, lo que ayudó a que historia, personaje y conflicto se instalen en mí”.
La casa de Translúcido —ubicada en Williamsburg, Brooklyn— no tenía conexión a Internet y en su interior se había instalado un estudio de 2 habitaciones, “era muy neoyorquino”, recuerda Manrique: “con esa onda industrial de haber sido parte de una fábrica, con puertas grandes, metálicas, rojas que para abrirse tienen que empujarse”.
Se trataba de un laboratorio para el actor que entendió, según dice, cómo un personaje puede afectar a su intérprete. “Empecé a somatizar la experiencia de Rubén, empecé a experimentar dolores y otras manifestaciones que solo se fueron al terminar el rodaje, después de hacer un viaje especial para despejarme de esa sensación de muerte que tenía a mi alrededor”.
Filadelfia fue el destino de Manrique luego del corte final de Translúcido. Un chapuzón en un río cercano a esa ciudad le hizo sentir una suerte de purificación, según le contó a este diario, en uno de los miradores que van a dar a Guápulo, en la avenida González Suárez.
La dirección de arte en Translúcido —a cargo de Celina Morffes— incluyó objetos de diseño que le daban paisajes de fondo distintos a una misma locación, “se trataba de encontrar la belleza en lo sencillo mientras tenemos la vida a nuestra disposición”, continúa describiendo Roberto Manrique, “era importante que en las escenas no se esperara el fin de la vida del personaje para apreciar lo que lo rodeaba, había belleza en todos lados”.
La transparencia de un personaje que asume su paso a la muerte de forma lúcida es el leitmotiv del largometraje. Además de ese tránsito, Manrique fue coproductor ejecutivo de la película luego de una primera incursión en cine —en el papel principal de Santiago Apóstol (Alan Coton, 2105)— y dice que “hay que encontrar canales alternativos y hacer cosas que impacten. De eso se tratan los tiempos difíciles, de encontrar otras maneras de desarrollar habilidades”.
El actor también visitó la ciudad de Guayaquil para la promoción de su proyecto, a inicios de mes. En la cuenta oficial del filme en la plataforma YouTube (Translúcido Film) se lanzó el primer avance de casi 2 minutos de duración, el 30 de marzo, fecha en que el programa En contacto, de Ecuavisa también transmitió el teaser.
En el elenco están las venezolanas Marisa Román y Miriam Pinedo, y los ecuatorianos Andrés Crespo, Cristina Morrison y Diego Mignone (que interpreta al personaje Salomón).
La música de Morrison (Luna), quien reside en Nueva York, integra el soundtrack de la obra. Y Andrés Crespo (Raúl) interactúa en algunas escenas con otros 3 personajes a través de la aplicación Skype: uno está en Quito, otro en Guayaquil y el tercero en Madrid.
La propuesta, que ha unido 3 países, espera auspiciantes para que su estreno sea a escala nacional. (I)
DATOS
Translúcido, del director Leonard Zelig, narra la historia de Rubén, un migrante a quien le han diagnosticado cáncer terminal. La película será estrenada en salas de cine de Ecuador en septiembre-octubre de 2016, y luego será distribuida por Golden Ceiba en circuitos independientes de los Estados Unidos, dirigiéndose principalmente a las audiencias hispanohablantes de ese país.
Roberto Manrique (Guayaquil, 1979), técnico en publicidad y comunicador social, es un actor ecuatoriano, conocido por interpretar papeles en varias telenovelas y en la película Santiago Apóstol, de Alan Coton.
La producción del filme estuvo a cargo de Manrique, Charles Martínez y Loló Bello.
En el elenco están actores como Marisa Román, Andrés Crespo, Cristina Morrison, Diego Mignone, Miriam Pinedo y Manrique. (I)