Rodolfo Muñoz hizo un foro sobre el filme que retrata a Agustín Delgado
"Quiero que Bonil vea mi documental sobre El Tin"
Cuenta el padre de Agustín ‘El Tin’ Delgado que su hijo tuvo una infancia silenciosa. “El problema era que hablaba poco”, aparece diciendo en el documental Tarjeta Roja del periodista Rodolfo Muñoz. Marco Delgado, uno de los hermanos del futbolista, en cambio, le andaba contando a todo el barrio sus aspiraciones. Quería ser marino y un día hizo que su padre, el fallecido don Arturo, lo lleve a la Costa para enlistarse en la Armada del Ecuador y cumplir su sueño naval.
En una parte del filme, Muñoz le pregunta a Arturo Delgado:
—¿Qué cree usted que pudo haber sido (Agustín, su hijo, si no se dedicaba al fútbol)?
—Eso. Saquemos conclusiones —le responde—: un trabajador, agricultor porque como no tuvo la preparación, qué más podía ser...
Pero el campo en el que ‘El Tin’ veía su futuro era el de juego y no la tierra productiva de Ambuquí (Imbabura), donde había nacido.
El poeta Antonio Preciado también fue entrevistado para el documental que se estrenó en 2009. El ex Ministro de Cultura dijo que al pueblo negro se le han “reservado” ocupaciones “en los servicios domésticos, sin acceso a la educación, con una escolaridad muy baja tradicionalmente, a lo largo de toda la historia republicana del Ecuador”, una realidad que, al haberse mantenido, ha hecho que se le asignen “determinados roles al negro”, algunos estereotipos incluso.
DATOS
‘Tarjeta Roja’ fue estrenado en 2009, pero adquiere una actualidad inusitada durante las Eliminatorias a la Copa Mundial de 2018.
Un sector de la prensa nacional fue criticado por el asambleísta Agustín Delgado, quien dijo que “el periodismo construye sociedades y, la verdad, tenemos una sociedad muy pobre precisamente por lo que escuchamos y vemos, por los informes que nos dan los periodistas en la radio, en los medios escritos y la televisión. Muchos no son profesionales, sino hinchas de los equipos”.
Entre las minorías étnicas del país, quienes se definían negros hace más de una década eran el 4,8% de la población ecuatoriana; mientras que, para el censo de 2010, la cifra subió al 7%. Un aumento que pudo tener que ver más con la aceptación de su identidad que con un cambio demográfico, según el documentalista Rodolfo Muñoz.Cuando Marco Delgado se embarcó en el que ha sido su destino hasta el presente, Agustín fue el encargado de ayudar a su padre en la agricultura pero, con 14 años y un deseo que no solía confesar, ‘El Tin’ se fue tras un balón de fútbol.
El antropólogo José Chalá asistió al cine foro que se dio en la sala Demetrio Aguilera Malta —de la Casa de la Cultura Ecuatoriana— el lunes pasado, fue otro de los entrevistados del largometraje, en el que dice: “si los negros somos vagos, cómo es que otros reivindican que vienen trabajando como negros. Hay un racismo solapado... dicen que no son racistas pero no dan empleo a los afroecuatorianos o los cargos que les dan son de última categoría”.
Los inicios de Delgado en el Club Deportivo Espoli se dieron luego de que quiso entrenar en el complejo del Deportivo Quito —que no pudo pagar lo que merecía—, antes de que llegara a ser la figura del Barcelona Sporting Club, antes de su incursión en Colombia, México e Inglaterra. La dupla que formó con Álex Aguinaga fue tan histórica como su llegada al Southampton Football Club, en que rompió prejuicios raciales a escala internacional.
Alguna vez, en un partido, haber fallado dos tiros en una de las eliminatorias a un mundial Sub-20 hizo que la prensa pusiera a ‘El Tin’ en el paredón, algo que, dice el jugador, “le ayudó porque he trabajado para ser lo que he sido”. También fue duramente condenado, incluso por la Comisión de Disciplina de la FEF (Federación Ecuatoriana de Fútbol), por haber participado en una gresca, mientras jugaba en Liga Deportiva Universitaria de Quito.
En el repaso de este episodio de su vida, los espectadores del documental abuchearon a Luis Chiriboga, presidente de la FEF, quien fue acusado de “haber tomado represalias” en contra de Delgado por el reclamo que el entonces seleccionado hizo para que se diera el pago de haberes y compromisos a él y algunos de sus compañeros.
“Hemos crecido solos —dice Agustín en Tarjeta Roja—, no ha crecido ni el periodista deportivo ni el dirigente, se han quedado abajo y, como no crecen con uno, piensan que lo pueden tratar como antes, cuando hacían lo que querían”.
El niño silencioso que fue uno de los futbolistas más célebres del país parece tener un sentido de la justicia tan riguroso como sus entrenamientos. Algo trascendental porque, a decir del catedrático Fernando Carrión, “la Selección del Ecuador terminó reemplazando al Congreso Nacional”.
Ahora, el asambleísta Agustín Delgado propuso la construcción de una Escuela del Milenio en Carpuela, además de la de Piquiucho —donde nació otra figura: Ulises de la Cruz— y tiene un Plan de Desarrollo de El Juncal y El Chota, que busca potenciar el turismo en esas zonas.
El caricaturista Xavier Bonilla ‘Bonil’ volvió a poner en debate el racismo en torno al fútbol, por una publicación que Muñoz atribuye a una “confusión enorme”, el periodista dijo: “Yo quiero que algún día Bonil vea este documental y valore la condición del personaje”. (I)