Pilar Abel no es hija de Salvador Dalí. Los análisis que contrastaron el ADN extraído del cadáver embalsamado del artista con los de la demandante, la vecina de Figueres que aseguraba ser su hija, niegan la relación de parentesco. Las pruebas realizadas en los institutos forenses de Barcelona y Madrid han salido negativas. El juez ya tiene los resultados.

El procedimiento arrancó en junio pasado, cuando una jueza de Madrid ordenó la exhumación del cadáver de Salvador Dalí y la obtención de muestras de su cuerpo para la práctica de la prueba biológica de determinación de la paternidad de Pilar Abel, una gerundense que presentó una demanda para ser reconocida como hija del artista.

Estos resultados son decisivos para el juicio del próximo día 18, en el que Abel tendrá que aportar alguna prueba que demuestre su tesis. El juez del caso aseguró en su día que era necesaria la prueba biológica de investigación de la paternidad.

En la demanda se recoge que Abel fue sometida previamente a dos pruebas de paternidad, pero que nunca ha logrado que le sean entregados los resultados. La primera prueba se la hizo en un laboratorio de San Sebastián de los Reyes, en 2007, con restos de piel y cabellos que quedaron pegados en una máscara de yeso que se hizo del pintor poco después de morir y que llegó a sus manos. La segunda se realizó en París el 6 de diciembre de 2007 en el despacho de Robert Descharnes, biógrafo de Dalí, para comparar las muestras de ADN de Pilar con el material genético que conservaba Descharnes del artista. (I)