Yoav Talmi, compositor y director que detenta los títulos de director emérito de la Sinfónica de Quebec, decano del Departamento de Dirección Orquestal de la Universidad de Tel Aviv y director invitado principal de la Israel Chamber Orchestra, estrenará en Guayaquil su Elegía para cuerdas, timbales y acordeón “Reflexiones de Dachau”.

Precisamente la pieza es la primera en un repertorio que trae en su primera visita a Ecuador el ensamble musical israelí, que ya tuvo su primera presentación en la Casa de la Música en Quito. El escenario para la Israel Chamber Orchestra,  mañana por la noche, desde las 20:00, será el Teatro Centro de Arte León Febres-Cordero, regentado por la Sociedad Femenina de Cultura, dirigido artísticamente por Mónika Cuesta.

El grupo está acompañado por el pianista Alon Goldstein, ganador de numerosas competencias internacionales, destinatario del “Salon di Virtuosi Career Grant” edición 2004, además del Subsidio de la Fundación Cultural Americano-Israelí. Él tocará, como solista, en el segundo tema del repertorio, ya escuchado en la Casa de la Música, Concierto para piano y orquesta Nº 2 en si bemol mayor, Op. 19 de Ludwig van Beethoven.

De Goldstein se dice que se ha convertido en una de las figuras más aclamadas de su generación. Uno de los favoritos del público y la crítica de Estados Unidos, Europa e Israel. Este pianista, admirado por su inteligencia musical y sus innovadores programas, se presenta asiduamente junto con las principales orquestas de Norteamérica y Europa. Graduado del Peabody Conservatory fue discípulo y, más tarde, asistente del ilustre Leon Fleisher.

A la par la Israel Chamber Orchestra, que el pianista acompaña en esta gira por Ecuador, es la más reciente generación de una agrupación camarística de primer nivel, actualmente uno de los pilares de la vida cultural de Israel, que fue fundada en 1965. Constituida por 34 músicos de talento, la orquesta lleva adelante una intensa agenda de compromisos, tanto en su país como en el resto del mundo, para difundir un repertorio de cámara que abarca desde el siglo XVIII hasta nuestros días, con la meta de interpretar y estrenar obras de compatriotas.

La orquesta tiene su sede en Tel Aviv-Jaffa y su principal financiamiento proviene del Ministerio de Educación de Israel y la Municipalidad de Tel Aviv Jaffa.

Gary Bertini fue su fundador y director artístico por 10 años, lo sucedió Luciano Berio en 1975, Rudolf Barshai  (1976-1981), Uri Segal, Talmi y Shlomo Mintz (1989-1993). Philippe Entremont fue su director artístico (1995-1998) y es ahora el conductor laureado de la Israel Chamber Orchestra. Noam Sheriff  fue su director musical (2002- 2005), sucedido por Gil Shohat, que también fue conductor en jefe (2005-2008). En 2009, Roberto Paternostro fue designado su consultor musical y Elizabeth Wallfisch, consultora del programa orquestal barroco.   

Talmi mantiene compromisos con las principales agrupaciones orquestales europeas y norteamericanas, presentándose constantemente como director invitado.

El tercer tema que interpretarán mañana los músicos israelíes es Sinfonía Nº 4 en la mayor, Op. 90 “Italiana” de Felix Mendelssohn-Bartholdy. Mañana, a las 19:30, en el Centro de Arte, habrá una conferencia preconcierto de las obras a interpretar, dictada por la maestra Aliona Dziouba, directora del Conservatorio Sergei Rachmaninov.

Las entradas cuestan $ 60 platea baja y $ 40 platea alta; además, el concierto cuenta con el apoyo del Consulado General Honorario de Israel en Guayaquil.