Las obras de arte urbano se suman a la entrega a domicilio en Ecuador
La pandemia volvió más recursivos a los artistas y el uso de las redes sociales ahora es más importante que antes. Las restricciones de movilidad los motivaron a buscar nuevas formas para sacar a flote sus emprendimientos.
Art Delivery.ec es una de ellas, a través de la cuenta de Instagram se promocionan las creaciones de hasta ahora 24 artistas de diferentes partes del país.
La entrega de obras se realiza desde hace un mes y medio en las ciudades de Guayaquil y Quito, siempre y cuando puedan ser llevadas en bicicleta.
Ache Vallejo es un artista visual que forma parte de la iniciativa. Él tiene un taller en el centro de la capital que también fue perjudicado con la semaforización de la covid. “Hemos tenido una buena aceptación, con esto estamos logrando cubrir los gastos de arriendo y operación, además permitió no cerrar el local y trabajar de forma distinta sin atención directa al público, pero para nosotros eso es mucho”, señala Ache.
Aunque los resultados son positivos y las ventas significativas, los artistas consideran que no están alcanzando las metas planteadas. Para lograrlo esbozan nuevas formas de circular con los productos y el ingenio de otras propuestas para atraer a las personas al arte.
Ache sostiene que los pilares de Art Delivery son creatividad y muchas ganas de trabajar, porque así se abrieron caminos entre la restricción de movilidad, crisis económica y depresión en el confinamiento.
El mecanismo de trabajo de este emprendimiento es que diariamente presentan en sus publicaciones “combos” de cada artista que pueden ir desde los $ 3 hasta los $ 45.
Los paquetes contienen stickers pines, lienzos para pintar, dibujos, llaveros, pósters, cuadros, entre otros elementos como manualidades y diseño digital. En cada trabajo se detallan las técnicas aplicadas por cada autor.
Este tipo de obras son estampadas en camisas y comercializadas. Foto: Cortesía - Pinosupay
¿Cómo venden los artistas de otras provincias sus obras?
Por ejemplo el artista tungurahuense Pinosupay envía sus obras desde la ciudad de Baños por courier hasta la capital o Guayaquil y sus obras son entregadas a domicilio en bicicleta.
“Para mí es muy gratificante este sistema porque no se contamina el ambiente y no solo me beneficio yo, sino que se le da trabajo a los mensajeros”, dice Pinosupay.
Él considera esta alternativa como una oportunidad para que su ciudad sea tomada en cuenta como algo más que un lugar turístico. “Los artistas de acá nos estamos uniendo y buscando para que se conozca el arte urbano que nace en este lugar”.
Las obras de Pinosupay están en el top uno de pedidos en Art Delivery ec en Quito.
Sus orígenes
Zanza es otro artista gráfico que integra la propuesta y comparte que la plataforma surgió además como una necesidad autogestiva y colaborativa para esta categoría. “Si bien hay mercados del arte, sabemos que tienen sus distintas dinámicas a la que nosotros proponemos y no existe una para los artistas de la calle y la pensamos para ayudarnos entre todos”.
De esta forma activan una economía o red de comercialización de obras. “Esto ha permitido que estemos en una primera fase, porque apuntamos ampliar el espectro de compradores y de gente que pueda visitar nuestra galería multifuncional porque es taller y estudio que se encuentra en La Floresta”.
En este sitio se exponen todos los productos de los artistas participantes de Ecuador, incluso también de otros países latinoamericanos. La tercera fase contempla consolidar una red de comunicación entre los artistas y los espectadores.
Entre sus proyectos no se descarta que se ejecute una exposición o evento que rinda un homenaje a los artistas de la plataforma. El objetivo es visibilizar sus prácticas y técnicas para llegar al producto final que es comercializado.
“Creo que hay más gestores culturales que están buscando espacios, pero por el momento hemos logrado lanzar la idea inmediatamente, aunque fue por necesidad de la pandemia y reactivación del medio artístico”, señala Zanza.
Los tres artistas se mantienen optimistas que con el pasar del tiempo Art Delivery se fortalezca y que el comercio cultural sea cada vez más valorado.
En su cuenta de Instagram se proponen 36 combos. Los compradores tienen la opción de “armar” su paquete de los autores que prefieran para después pagar vía transferencia bancaria.
La iniciativa destaca en su perfil que busca visibilizar la producción de creadores locales en la línea del graffitti, la gráfica y el arte urbano. “Recomendado al 100%, los enmarcados están lindísimos y las piezas llegaron muy protegidas e impecables, en perfecto estado, posteó @tiempos_asi (I)