Un musical circense narra el origen del cacao en Ecuador
Una juglaría contemporánea que conjuga teatro, música y acrobacias -bajo la carpa circense de La Insensata- presenta hoy y mañana La deliciosa historia de xocolate, en la explanada del Teatro Sánchez Aguilar (TSA).
Se trata de un trabajo producido por los dramaturgos Matías Belmar, Pancho Arias y Tanya Sánchez -del Círculo de Artes Escénicas- quienes protagonizan y narran el origen de la semilla y los hitos relacionados a su evolución en un trabajo polivalente, donde a más de caracterizar de 4 a 10 personajes, también interpretan las canciones con marimba, acordeón, percusión y bajo.
Sánchez, productora del proyecto, conversó con EL TELÉGRAFO sobre la investigación que realizó junto con su equipo para convertirlo en una obra lúdica.
“Nuestra forma de crear es al revés, no partimos de un texto escrito y lo ponemos en escena, sino que trabajamos una dramaturgia performativa que quiere decir que leemos sobre un tema todos los actores involucrados para dominarlo y después nos tiramos a improvisar”, manifiesta la actriz sobre la radiografía que hicieron del producto con entrevistas a empresarios y profesionales involucrados en el mercado, como Patricia León Guerrero, productora cultural del espacio Ciudad Cacau y Jaime Freire, conocido como ‘Papá Cacao’, por ser el creador del proyecto de reactivación del Cacao Nacional Fino o Aroma, del Ministerio de Agricultura y Ganadería.
A estos encuentros se sumaron estudios antropológicos del hallazgo de la semilla y los procesos para transformarla en chocolate, citados en libros como Ecuador tierra del cacao, de Lourdes Páez (directora de la Academia del Cacao) y La verdadera historia del chocolate, de los autores Sophie y Michael Coe.
La artista cuenta que la motivación principal de esta iniciativa fue constatar que es originario de Ecuador, una teoría del antropólogo ecuatoriano Francisco Valdez, quien descubrió en una de sus expediciones -en 2012- los restos de la fruta tropical entre algunas muestras de la cultural Palanda, en Zamora Chinchipe.
José Araya, director chileno de cine y teatro, fue invitado a dar forma al libreto, basándose en las exploraciones y experimentos que los actores registraron. Estos fueron transcritos por la pluma de la dramaturga Karen Carreño.
“Lo que hicimos fue elegir ciertos hitos históricos relacionados al cacao, porque es un período de historia bastante amplio que comprende desde hace cinco mil años hasta nuestros días”, relata Sánchez.
El título de la obra con x en xocolate hace referencia al origen de la palabra en idioma náhuatl (lengua azteca) que se forma a partir de las raíces xoco, que significa “amargo”, y atl, que se traduce en “agua”.
La historia se cuenta por episodios y se inicia en la etapa prehistórica con la cultura Palanda; luego salta a México por los mitos y rituales que desarrollaron los aztecas, para entrelazarse finalmente con la llegada de los españoles a Centroamérica, y cita a Hernán Cortés, quien llevó la semilla a la corte de Felipe II.
“Contamos todos los usos que surgieron en Europa en el siglo XVI y cómo el cacao que en un momento era una bebida se transformó en una barra, proceso que se vivió en la revolución industrial, en Holanda, donde se descubrieron algunas máquinas en las que se fabricó el polvo y pudieron procesarles el azúcar refinada. Entonces el chocolate es un alimento que nos permite visualizar cómo ha avanzado el mundo”, describe la artista.
Sugestiva puesta en escena
“Todos los elementos están a la mano y tampoco es una propuesta que descansa en cambios de vestuario ni en grandes exposiciones escenográficas, la idea es involucrar al público a un teatro que transforma los objetos y hasta los instrumentos en algo útil para narrar los capítulos”, dice la artista y añade que una tela acrobática es parte de la escenografía que va moldeando figuras en vivo como un árbol, un castillo o el vestido de una princesa.
La obra será presentada hoy y mañana, a las 11:00 y 16:00. Permanecerá en cartelera hasta el 16 y 17 de junio, en el mismo horario. (I)