Música peruana busca espacio en su radio local
A mediados de este año, la inquietud asaltó a la programación radial peruana: una serie de voces pugnaba porque se revise la Octava Disposición Complementaria y Final de la Ley de Radio y Televisión, en la que se señala que “los titulares de los servicios de radiodifusión deberán establecer una producción nacional mínima del 30% de su programación, en el horario comprendido entre las 5 am y 12 am, en promedio semanal”.
Esa pugna, sin embargo, no era nueva. Aprobada en 2004, la mencionada ley ha tenido una serie de cuestionamientos por la forma en la que se la ha interpretado, dándole una diversidad de contextos y usos a la normativa de inclusión de la producción nacional. “La existencia de la ley no ha significado su implementación, durante años, los dueños de medios de comunicación han justificado ese 30% de producción nacional con el equipo técnico, presentadores, programadores, etc., no lo han hecho con la música”, indicó el cantautor peruano Omar Camino.
De acuerdo a un informe independiente emitido el 4 de marzo pasado, en las radios que emiten el género rock en el Perú, el 90% de las canciones es en inglés, mientras el 10% restante es ocupado por temas en español de la década del 80.
Para el abogado y músico Walter Cobo, autor del informe, esa mínima cuota otorgada por las radios es una contradicción frente a la ley. “No se puede pensar que el mundo del rock peruano lo conformen cuatro o cinco bandas de la década del 80, ni tampoco cuatro bandas o solistas actuales”.
Su punto de vista cuestiona esa interpretación arbitraria de la norma, cuyo acertado cumplimiento es requisito básico para renovar la licencia de las estaciones de radio en el vecino país. “De acuerdo a la interpretación legal, la autoridad nacional de comunicación es la que debe evaluar el número de horas otorgadas a la producción nacional en las radios, y si estas cumplieran con su deber, la autoridad renovaría sus licencias”.
En la realidad, aquello no sucede. Este año, un 82% del total de radios en Perú, de acuerdo al Consejo Consultivo de Radio y Televisión, registró fines comerciales como justificativo de su funcionamiento.
“Ese nivel de comercialización de los contenidos hace que muchas veces la programación siga parámetros internacionales para vender sus productos: música de moda, parrillas que vienen programadas por la industria discográfica, entre otras cosas, terminan por convertirse en obstáculo para el creador nacional”, dijo Omar Camino.
Conscientes de esta realidad, Walter Cobo y Percy Céspedez iniciaron a finales de marzo la recolección de 10 mil firmas para pedir al Congreso peruano la revisión de la ley y su aplicación en radios locales. La iniciativa, explicaron, no vela solo por el género rock, sino por las manifestaciones populares que van perdiendo espacio en los medios.
La iniciativa tuvo tal acogida en redes sociales que, en abril pasado, Cobo y Céspedez, acompañados de un grupo de artistas nacionales, decidieron lanzar la plataforma virtual “Haz que suene tu música Perú”, con la cual buscan condensar todos los reclamos y requerimientos de los artistas en este tema.
Para Camino, iniciativas como esta son válidas en un medio que ha carecido de organización. “Los propios músicos y creadores no hemos cuidado una organización interna, permitiendo que haya un divorcio entre lo que actualmente se produce y lo que se difunde, así como prácticas soterradas entre las que cuentan la paga al programador para que pase determinada canción”.
Frente a esos abusos, los músicos han logrado articular, bajo el apoyo de algunos congresistas, una propuesta que lleva por nombre “Proyecto de Ley de Promoción de la Música Nacional”, presentado al legislativo en julio pasado.
Sergio Tejada, congresista y músico de bandas reconocidas en el mundo del rock limeño, fue el encargado de acercar la propuesta al pleno. “Hay muchas radios que pasan porcentajes muy bajos de música nacional y lo que se busca es garantizar que pueda existir un espacio para el músico y compositor nacional en porcentajes que varían de acuerdo a si se trata de espacios comerciales, espacios educativos, espacios comunitarios o espacios públicos y establecemos algunos porcentajes para música nacional o contenidos indígenas”, indicó el legislador.
La propuesta busca que no menos de un 35% del contenido de las radios sea producción nacional, del cual no menos del 50% corresponda a producciones nuevas. Así mismo se busca que no menos del 10% de la programación radial tenga contenidos indígenas en los distritos en donde habitan estos pueblos.
La propuesta, que aún no ha sido discutida en el pleno, ha merecido el apoyo y el rechazo de diversos actores sociales.
Para Sergio Zabala, gerente de la Corporación Radial del Perú, que agrupa a cinco radios de alcance nacional, lo que se busca con esta iniciativa es canalizar la inconformidad de un sector específico de músicos, mas no es el sentir de todos los involucrados en el tema. Para él, 30% de producción nacional involucra a toda la cadena de producción, no solo a lo que se escucha en las radios.
Santiago Alfaro, antropólogo peruano, señaló en cambio que del buen cumplimiento de esta normativa dependen las opciones que el público puede tener a su disposición, ya que por “fallas del mercado” se podrían ver limitadas y sesgadas a un tipo de producción específica.
“Considero que son necesarias políticas que permitan al músico insertarse y no que le pongan obstáculos, es tarea del Estado sentar a conversar con creadores y difusores de medios masivos, buscando un acuerdo”, manifestó Camino.
Aunque la atención mediática generada por la propuesta de revisión de la ley va disminuyendo, la labor de los activistas sigue adelante. La organización de mesas de trabajo, foros e intercambio de criterios con especialistas en el tema son actividades con las que se busca difundir la idea, hasta lograr su debate y posible aprobación en el Congreso Nacional.