Medio Oriente va por su patrimonio
El alto comisionado de la ONU para los derechos humanos, Zeid Ra’ad Al Hussein, y autoridades locales de ocho municipios, entre ellas Mosul (Irak) o Tombuctú (Malí), adoptaron este lunes la Declaración de Ginebra, un documento que tiene por objetivo la protección del patrimonio cultural de las ciudades.
Las ocho directrices que contienen este documento fueron firmadas en el Palacio Eynard de Ginebra por el alto comisionado, el alcalde de la ciudad suiza, Rémy Pagani, y también por representantes de otros municipios o directamente afectados por la destrucción del patrimonio cultural o solidarios con sus pares.
El documento fija obligaciones a cumplir por las localidades en los procesos de rehabilitación, y propone la inclusión de mecanismos participativos en la identificación del patrimonio cultural, en la evaluación de los procesos de reconstrucción y de su impacto en la población. (I)