Los lectores cubanos acceden a 32 obras ecuatorianas en la FIL

El personal del Ministerio de Cultura y Patrimonio calculó,  en base a varios conteos,  que cada 15 minutos al menos 180 personas entran a uno de los tres estantes que tiene Ecuador en la Feria Internacional del Libro de La Habana, en Cuba. Eso arroja un registro de al menos 720 visitantes cada hora.

De hecho la actividad es intensa en el pabellón ecuatoriano de la feria, ubicado en el ala derecha de la Fortaleza San Carlos de La Cabaña. Allí están los tres estantes del país resguardados por un muro de piedra con al menos cinco cañones antiguos y una enorme bandera cubana.

Los curiosos son atraídos por tres personajes: un payaso, un danzante de Pujilí y una actriz que representa a la poeta cuencana Dolores Veintimilla de Galindo. Antes de ingresar la foto familiar es casi imprescindible, además de la explicación sobre quiénes son y qué hacen. “Visite el stand de Ecuador, conozca nuestra historia”, repite constantemente el danzante, quien no luce cansado pese a sostener su enorme máscara y soportar el inclemente sol.

Son tres salones: la sala expositiva, la sala editorial y la sala de presentación Pablo Palacio. El primero es una muestra universal de Ecuador.  Allí yacen algunos ejemplos de arte precolombino y colonial. Pero también están objetos históricos como una réplica de la espada de Eloy Alfaro, un poncho de Leonidas Proaño y un retrato de Matilde Hidalgo. Igualmente están dos pancartas con casos recientes: dolarización y el caso Chevron-Texaco. Son estos dos últimos los que más preguntas generan, las cuales son resueltas por los expositores.

En el segundo salón se exponen decenas de obras ecuatorianas: novelas, ensayos, textos académicos, históricos.  Las personas pueden tomar los ejemplares, leerlos, hojearlos, pero no comprarlos. El Ministerio de Cultura y Patrimonio no trajo obras para vender debido a que en Ecuador estos cuestan entre diez y veinte dólares,  mientras que aquí oscilan entre 30 y 50 centavos. Sin embargo se subsidió un lote y otras entidades donaron otros que se expenden desde 3 hasta en 10 pesos cubanos.

Al mismo tiempo trajeron 9.000 ejemplares de 1.000 títulos para obsequiar. También regalan libros para colorear, los cuales se reparten al final del stand literario y que es la atracción de los niños porque se han dispuesto mesas y sillas para ellos, bajo un letrero donde se lee “Ecuador ama la literatura”.

Igualmente la oferta literaria de Ecuador está en toda la feria. Varias editoriales cubanas,  entre ellas, Casa de las Américas,  Línea Azul, Nueva gente, imprimieron 32 libros de autores ecuatorianos, cada uno con un tiraje de 2.500 ejemplares.

El tercer stand, la sala de presentación Pablo Palacio, es donde se realizan lanzamientos y conferencias.  Fue allí donde estuvo la ministra de Defensa, Fernanda Espinosa, quien presentó la revista Patria y habló sobre su trabajo en poesía y Raúl Pérez presentó Páginas Escogidas, una antología de Pablo Palacio.

Montar estas tres salas no fue fácil pese a que el trabajo empezó en septiembre del año pasado. El bloqueo estadounidense complica todo en la isla. Daniela Fuentes, subsecretaria de Emprendimientos Culturales del Ministerio, cuenta que debido a la cumbre de presidentes de la Celac, de hace tres semanas, se agotaron algunos materiales necesarios como el triplex. Las autoridades tomaron la decisión política de que nada debía importarse de Ecuador porque el objetivo es que todos los recursos invertidos se queden en Cuba.  Por eso se contrató a una empresa cubana que levantó las estructuras con yeso y masilla.

Los organizadores también sintieron el bloqueo con las comunicaciones.  El Internet es escaso y caro y   “no podíamos enviarles los pasajes a los escritores o la programación”, contó Fuentes.

Además hay otras actividades, incluso fuera de la sede principal. Por ejemplo el sábado,  en la Casa Guayasamín, se abrió una exposición de artesanías y en la Casa del Alba, Marta Harnecker, presentó su libro digital Ecuador.  Una nueva izquierda en busca de plenitud.

Son cuarenta escritores ecuatorianos los que llegarán a la isla a lo largo de diez días de feria y cada uno tendrá,  en promedio tres eventos.

De hecho el Ministerio de Cultura y Patrimonio planteó 100 actividades entre muestras, conferencias,  lanzamientos y más porque la oferta no solo se reduce a la literatura.

Este fin de semana estuvieron en la isla Mirella Cesa, Karla Canora, Mariela Condo, la banda Mocha y Benjamín Vanegas, quienes participaron en el acto inaugural de la Fil y en una gala la noche del sábado.

Para la próxima semana se prevé la llegada del grupo Teatro del Cielo, una muestra de cine encabezada por Fernando Mieles y una exposición fotográfica de Manuel Avilés.

El objetivo es que los cubanos conozcan toda la cultura ecuatoriana en sus diversas manifestaciones.