Las rutas patrimoniales son una vía para la economía sostenible en el mundo

El 1 de febrero la Unesco y la Unión Europea (UE) iniciaron la primera fase de lo que serán las Rutas del Patrimonio en esta zona del continente. El proyecto arranca con la proyección de que desde 2017 los turistas puedan acceder a plataformas y aplicaciones móviles con información, mapas y cronogramas de las manifestaciones patrimoniales inmateriales. Con esta primera experiencia, la Unesco espera además generar un modelo de rutas patrimoniales que pueda replicarse en el mundo como fuente de desarrollo económico sostenible, creando sinergias entre los sectores dedicados a la cultura patrimonial.

“El proyecto ‘Rutas del Patrimonio Europeo’ es una demostración concreta y necesaria de la fuerza del patrimonio cultural como fuente de desarrollo económico sostenible para las comunidades y regiones”, declaró la directora general de la Unesco, Irina Bokova. Para la directora, este proyecto europeo podría servir a los grupos sociales, a los conservacionistas y a los líderes políticos de varias partes del mundo como un modelo que inspire estrategias de desarrollo que se apoyen en el valor universal y excepcional de los sitios patrimoniales.

Las ‘Rutas del Patrimonio Europeo’ trabajarán con la participación de autoridades locales, gestores de sitios del patrimonio, instituciones culturales, como museos y galerías; entidades activas en el ámbito del patrimonio inmaterial y operadores del turismo. Uno de los públicos objetivos, de acuerdo al portal de la institución, son turistas de China, América del Norte y Europa. Por el momento este proyecto cuenta con un presupuesto provisional de 1,5 millones de euros (unos $ 1’652.700).

En América Latina también se ha buscado impulsar este tipo de rutas turísticas, a través de un trabajo mancomunado, en pos del desarrollo de las comunidades locales vinculadas de forma directa y ancestral con el patrimonio.

Un ejemplo de ello es el convenio que recientemente se firmó entre Perú, Bolivia y Ecuador para el desarrollo de capacidades locales para la promoción del turismo cultural comunitario, integrando el patrimonio de lo que fue la Ruta del Inca -el Qhapac Ñan- en los 3 países firmantes y que comparten la declaratoria de la Unesco.

El objetivo, de acuerdo a información del Ministerio de Cultura y Patrimonio, es generar un proceso de turismo comunitario conjunto, para que quienes recorran estos sitios tengan un catálogo de servicios e incluso puedan hospedarse en las residencias de los pobladores cercanos, en una vivencia casi etnográfica. Además, al igual que con el desarrollo de rutas patrimoniales en la Unión Europea, se busca establecer un modelo de ingresos sostenible entre estas comunidades.

El proyecto tiene un presupuesto de $ 1’326.525 y en Ecuador se enfocaría en un tramo del Camino del Inca que va desde Baños Achullapas, en Chimborazo, hasta Ingapirca, en Cañar, un total de 32,5 km.

En 2012 se planteó un estudio de ruta turística en las ciudades patrimoniales de La Habana (Cuba), Cartagena (Colombia), Quito (Ecuador) y Cuzco (Perú). La propuesta la hacía el ministro de Turismo de Cuba. Sin embargo, este proyecto no se ha concretado aún.

A nivel local, con declaratorias patrimoniales nacionales, hay otras iniciativas. En Santa Elena, por ejemplo, en coordinación con el Ministerio Coordinador de Talento Humano y el Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC) se trabajó en el itinerario cultural ‘Camino de los dioses Guancavilcas’. Con este se recorren las comunas de Chongón, Limoncito, Juntas del Pacífico, Julio Moreno, Sube y Baja, Sacachún y Buenos Aires, todas integrantes del ancestral territorio Guancavilca (800 a 1532 d.C.) y que tienen como elemento común la presencia de monolitos provenientes de un antiguo centro ceremonial ubicado en el cerro Las Negras.

Uno de los planteamientos de este proyecto es involucrar a los visitantes en el conocimiento de la cosmovisión de estas comunas, así como contribuir a la conservación de su herencia cultural y del ecosistema de la cordillera. Dentro de estas comunidades existen proyectos de hospedaje comunitario, manejados por personas de la localidad.

En Manabí, la regional 4 del INPC inició un trabajo junto con el Gobierno Autónomo Descentralizado de Portoviejo, para poner en valor bienes inmuebles patrimoniales de la ciudad en un recorrido que inicia en el Complejo Arqueológico Jaboncillo, a 5 minutos de Portoviejo. Posteriormente, se recorren 4 inmuebles patrimoniales: la Casa Rosada, la Casa Cevallos Arízaga, la propiedad de los padres jesuitas Wilfrido Loor y la tradicional Plaza de Armas, en el parque Vicente Flor.

El recorrido cierra con una exposición de objetos que fueron trabajados con técnicas ancestrales de moldeados en barro y constituyen réplicas de objetos desaparecidos, como una pequeña maqueta del Portoviejo antiguo en barro.

Esta ruta se promocionaría durante el año a través de operadoras turísticas. Existen también iniciativas como la Ruta del Cacao, planteada por la Prefectura del Guayas y que, en concordancia con el camino del ferrocarril, dinamiza un sector productivo. (I)