La vida de ‘Maquinita’ revive el tren de Durán
Marlene, Betty, Eduardo, Carlos y Guillermo Davis Asanza llevan sobre sí una herencia que se remonta al siglo pasado, cuando su padre, Guillermo “Maquinita” Davis Piñeres, se dedicaba a armar máquinas, arreglar piezas y fabricar calderas, ruedas y brazos de gigantescas locomotoras de la Empresa de Ferrocarriles Ecuatorianos (EFE).
Estas inmensas cajas de hierro unirían desde entonces las tierras del Litoral con las cumbres andinas. Los hermanos Davis son portavoces de la memoria colectiva de los duraneños. En medio de tornos, cepillos, taladros y fraguas, buscan revivir el legado de su padre. Para eso, realizan exposiciones con el propósito de enseñar sus técnicas.
Carlos y Guillermo, mecánicos de profesión, custodian y dan mantenimiento a las tres locomotoras de vapor a escala que creó su padre en 1975, obras maestras de la precisión y la ingeniería, que todavía causan alboroto y emocionan a quien presencia el momento en que uno de esos motores se enciende, cada 16 de octubre, como parte de los festejos de Durán.
Ese mismo día en que la expectativa está centrada en ver el humo que emanará de la maquinita luego de que las bombas de inyección hidráulica empiecen a levantar presión, se celebra también el cumpleaños de Betty Davis. Apenas se escuche el silbato, se iniciará el paseo sobre una pista desarmable.
Esa era la costumbre de “Maquinita” Davis, hijo de Marieta Piñeres, colombiana que estuvo enrolada en las fuerzas liberales que apoyaron la Revolución Alfarista, y del afroamericano William Davis, un mecánico maquinista. Y esa costumbre se ha convertido ya en tradición.
Pedro Villegas Arcos, periodista y documentalista independiente guayaquileño radicado en Durán hace 34 años, recientemente ganó un subsidio de 10.000 dólares por parte del Consejo Nacional de Cine (CNCine) para la producción del largometraje de 52 minutos titulado “Maquinita Davis”, cuyo rodaje espera terminar en 2013, pues para concluir el proyecto audiovisual en su etapa de posproducción, deberá buscar fondos de otras instituciones.
Villegas ya tuvo un primer acercamiento con la vida de Guillermo David Piñeres, y de esa experiencia surgió un video de preproducción, en 2009, de 26 minutos de duración, que le sirvió para socializar y lograr el financiamiento necesario para llevar adelante el resto del trabajo.
Existe la posibilidad de que una de las pequeñas locomotoras sea vendida y deje el territorio ecuatoriano, lo cual significaría un punto de quiebre en la realización del documental. Entonces, habrá dos focos de atención sobre los cuales se centre la historia: El primero, que tiene que ver con el funcionamiento de la pequeña locomotora y su contexto histórico (los años de trabajo y los cientos de trabajadores desplegados en Costa y Sierra, el significado que tiene para la integración nacional la construcción de las redes de ferrocarriles, el hito que constituye la Revolución Liberal para la consecución de esta obra, etc.), y el segundo, que se enfoca en la necesidad de la familia Davis de que no se concrete la venta de esa locomotora porque es parte fundamental del patrimonio familiar.
Por ello, los Davis buscan hablar con el presidente Rafael Correa. Según Villegas, en el cronograma de rodaje de “Maquinita Davis” consta la gestión de una audiencia presidencial para que los hermanos Davis expongan la problemática de las dos locomotoras en miniatura.
Testigos de luchas y memorias
Reconstruir el mundo de los trabajadores que le dieron vida al ferrocarril es un encargo que tiene Pedro Villegas Arcos. “Descubrí toda la riqueza histórica que se teje alrededor de la obra monumental de Alfaro, creada en 1908, que buscaba la unificación nacional, y que era mal vista por la Iglesia Católica de su tiempo. Decían que la línea férrea era el camino de los demonios”, acota Villegas.
“El camino de los demonios” es, precisamente, el nombre de otro filme que Villegas proyecta para este 2012, que durará 75 minutos, financiado con 10.000 dólares por parte del Ministerio de Cultura y 4.200 dólares de la Municipalidad de Durán. Este es un documental épico sobre la vida de cinco jubilados del ferrocarril que en sus últimos días de vida conservan los recuerdos de su oficio.
“En el acercamiento con los personajes protagonistas descubrimos características folclóricas propias de esta clase trabajadora, como con el ex ferroviario Luis Sánchez Borja, que fue el autor del himno del cantón y de pasacalles y sanjuanitos que interpretaba con su grupo “Tradición”, de la tercera edad (...), en Durán. Esto le dio un espacio para expresarse”, relata Villegas y recuerda con nostalgia que Sánchez falleció en noviembre del 2009, luego de legar su testimonio. Sánchez fue parte de la Hermandad de Ferroviarios de Durán, grupo de trabajadores jubilados de la estación.
En estas hermandades, los pensionistas cuentan con beneficios como fondos por enfermedad, mortuorios y una compensación económica anual para paliar la irrisoria jubilación patronal de 22,69 dólares que reciben 1.484 jubilados ferroviarios del IESS. Una delegación de la hermandad estuvo presente, en 2008, en la Asamblea Nacional Constituyente de Montecristi, para solicitar que se analice su pedido.
Villegas se desempeña como secretario de la Red de Gestores Culturales de Durán (RGCD), creada en junio 2010, agrupación que busca fortalecer el patrimonio ferroviario y generar nuevos espacios culturales para los artistas duraneños. “Para la Red es importante rendir un homenaje a quienes dejaron su juventud al servicio del ferrocarril ecuatoriano y revivir con ellos momentos inolvidables de esa experiencia. Resaltar la figura del general Eloy Alfaro y de quienes ayudaron a construir la magna obra. Este patrimonio tangible nos demuestra lo que nos dejó el ferrocarril y a sus valerosos e ingeniosos trabajadores”, subraya.
En junio del 2011, la RGCD organizó el festival artístico “Memorias del Ferrocarril”, para homenajear a la Hermandad de Jubilados Ferroviarios del Cantón Durán. En la edición 2012 de estos festejos, incorporaron al nombre la frase “...y la Hoguera Bárbara”. “Como un recordatorio, aunque atrasado, del centenario. Lo hemos querido hacer los días sábados 16, 23 y 30 de junio, en el Centro de Convenciones Luis Sánchez Borja”.
El evento incluyó la declaración mediante Ordenanza Municipal de junio como el mes del ferrocarril ecuatoriano, pues el tren de Alfaro se inauguró el 25 de junio de 1908.
En la programación del festival “Memorias del Ferrocarril y la Hoguera Bárbara”se entregaron placas para Heriberto de la S, por su vida en la arena política y la lucha sindical ferroviaria, y para Rafael Aulestia, por su labor en el ferrocarril y en el deporte nacional (fue maratonista y propulsor del ciclismo máster y medalla de bronce en los Juegos Bolivarianos de 1965). Ese día los asistentes pedalearon desde Durán hasta Yaguachi y regresaron en el tren rehabilitado.
La RGCD, a través de Villegas y de Fernando Freire, puso en marcha, desde mayo de 2011, un cine club denominado “Pata de Cabra”, en el bar Concert Galería “Sonata y Bulla”. Cada miércoles hay recitales y proyecciones, acompañados de un foro. En agosto del 2011, la Red presentó un proyecto a la Dirección Municipal de Cultura para promover la apertura de un espacio adecuado que sirva como sitio de entretenimiento familiar y cultural para Durán y sus artistas.
De concretarse el pedido, este espacio se convertiría en un Centro Intercultural Comunitario, ubicado en la zona centro urbano-rural del cantón, que sea capaz de generar un proceso de construcción de políticas culturales a través de la capacitación, la producción y la difusión de las artes.