La lengua de Cervantes incrementa sus escuelas de enseñanza en China
En 2018 el gobierno chino añadió al plan curricular el español, como asignatura de Bachillerato, junto al japonés, inglés y ruso.
Sin embargo, la lengua de Cervantes es parte de una misión estratégica, dado que Iberoamérica concentra el 30% de la inversión exterior del gigante asiático, lo que conlleva una creciente demanda de trabajadores que sepan español.
Durante los últimos tres lustros, América Latina y China se han convertido en socios estratégicos en comercio, inversión y cooperación.
Perú y Argentina concentran junto con Brasil más del 80% de la inversión china, singularmente en sectores como la energía y la minería.
Hasta el año pasado, según los datos del Ministerio de Educación chino, en Pekín se registraron alrededor de 1.200 profesores del idioma, de los cuales entre 100 y 200 son nativos.
Hace dos días la Universidad de Salamanca suscribió, con sus Escuelas de Lengua Española, dos nuevos acuerdos de franquicia para abrir centros de enseñanza de español como lengua extranjera en las ciudades chinas de Fuzhou y Qingdao.
En la actualidad hay cerca de 14.000 estudiantes de español en las universidades chinas, unos 32.000 si se contabilizan los alumnos en cualquier nivel, según el Instituto Cervantes. (I)