LOS títulos de VARIOS invitados chilenos apenas están llegando a las perchas de Mr. Books y el FCE
La Feria del libro engancha lectores a través de redes sociales
“Cuando despertó una mañana, después de un sueño intranquilo, Gregorio Samsa se encontró sobre su cama convertido en un monstruoso insecto...”. El drama que inicia La Metamorfosis, del escritor Franz Kafka (1883 – 1924), provocó un encuentro en la sala de presentaciones de la Feria Internacional del Libro de Quito (FIL), la lluviosa noche del lunes pasado.
“Así (como un bicho raro) puede sentirse uno cuando no encuentra lo que busca en una librería”, dijo Galo Torres, mientras intentaba ingresar a la antesala del Museo Nacional de la Casa de la Cultura que ya se había llenado.
“Yo leí La Metamorfosis y esto hizo Kafka conmigo” se titulaba el conversatorio en el que el librero Miguel D’Amato, el profesor Álvaro Alemán y el escritor Andrés Cadena abordaron al escarabajo kafkiano frente a una veintena de lectores, jóvenes y ancianos. Torres entró durante un minuto, se sentó en un rincón del suelo y salió del lugar antes de que el librero argentino le respondiera a la narradora Gabriela Alemán que el gusto de quienes buscan un libro es decisivo para recomendarles un título en particular, aunque se soslayen obras universales: “si no quieren un libro, pues les doy otro”, dijo D’Amato.
“Como un loco, como un tipo extraño”, se sentía Torres, según dijo, al hablar brevemente con una vendedora del stand –o pabellón– de Chile, el país invitado de honor a la FIL 2015 y haberle preguntado dónde podía encontrar Poema de Chile. “¿Es un libro?”, le preguntó la chica al escuchar el título de la obra, escrita por Gabriela Mistral –la escritora que se homenajea en la octava edición de esta Feria, a 7 décadas de que recibiera el Nobel–. “Un libro, claro”, sonrió Torres antes de que un librero chileno le contestara que se había agotado.
La oferta chilena en la Feria del libro depende de las editoriales, que enviaron una muestra somera a las perchas. En el lugar no se podía encontrar, por ejemplo, y para seguir con los requerimientos de Torres –estudiante universitario–, el último libro del periodista Juan Pablo Meneses, Una Vuelta al tercer mundo (Debate, 2015) ni Las películas de mi vida (Alfaguara, 2003), de Alberto Fuguet... “Como el Gregor Samsa”, repetía Galo Torres.
Lectores (afortunados) que encuentran su enjambre
Los escritores chilenos Raúl Zurita y Gabriel Salazar no solo tienen en común el haber ganado el Premio Nacional –de Literatura e Historia–de su país, sino que ambos vinieron este año a la FIL quiteña.
Sus últimas publicaciones: la antología poética Tu Vida rompiéndose (Lumen, 2015) y el ensayo histórico La Enervante levedad histórica de la clase política civil (Chile, 1900 - 1973) están disponibles desde el lunes –día en que dejaron el país–, en el Fondo de Cultura Económica y Mr. Books.
Los dos tomos son grandes y tienen lugares privilegiados, pero el sociólogo Gabriel Redín tenía al estadounidense Paul Auster en mente y en una de sus manos. La Noche del oráculo (Booket, 2003) ocupa sus ratos libres y, en el stand del grupo editorial Planeta, encontró una mesa sobre la que brillaban las tapas blancas de La Trilogía de Nueva York que ya se ha leído.
El Olvido que seremos (Seix Barral, 2007), del colombiano Héctor Abad Faciolince, es uno de los libros más vendidos del pabellón que ofrece descuentos del 15% –antes de la noche en que las rebajas subirán al 20%, mañana– pero Redín se decide por una edición de tapa dura de La Metamorfosis y Otros relatos animales (Austral, 2015) a riesgo de que su traducción haya convertido al escarabajo de la tapa en el “monstruoso bicho” de la primera página. “Así es mejor, a mi Kafka nunca me pareció gracioso, sino terrible”, dice Redín, contradiciendo a Álvaro Alemán, quien, en la sala de conferencias, habló del ‘humor’ del escritor que confesó sus pesares reales, de forma brutal, en Carta al Padre. (I)
Datos
La oferta infantil de la Feria del Libro tiene, a las 09:00, un taller de escritura creativa que dictará la mexicana Patricia Garza, en el Salón Talleres, Museo Nacional de la CCE.
Cuentacuentos se presentarán cada 35 minutos, a partir de las 10:30, en el Área común, Pabellón Alternativo. Y, en el Auditorio, a las 10:00, saldrán a escena los Títeres Teja La Coneja, de Rana Sabia.
“Prohibido NO tocar”, dice el letrero que la editorial Girándula ha puesto en su Giranduteca, un espacio reservado para los lectores más pequeños. En la FIL también está la revista ¡Elé¡, de Zonacuario.
La Red Social que deriva en papel
¿Es posible llegar a un libro a través de YouTube?
Los libreros de Planeta han colocado centenas de ejemplares coloridos en una percha en particular. Una a la que lectores jóvenes suelen llegar ‘navegando’, a través de Internet. Solo el pasado fin de semana –La FIL se inauguró el día viernes–, una treintena de títulos fueron adquiridos por efecto de los YouTubers. El neologismo alude a la comunidad virtual de usuarios de la red social de audio y vídeo a través de la cual recomiendan –reseñan acaso– algunos contenidos. Como los de Luna de Plutón (Planeta, 2015), de Dross; Virtual Hero (Planeta, 2015), de El Rubius; o Wigetta, Un Viaje Mágico, de Willyrex y Vegetta777.
Este último se presenta como “una historia ilustrada e interactiva que se inspira en el mundo de los videojuegos”. Las aventuras incluyen una “invasión zombi que fulmina el sitio en el que viven”, uno caracterizado por “intensos duelos (acaecidos) al amanecer, brujas y gigantes...”.
La reseña prosigue tan vertiginosa como la rapidez de la web: “Para salvar a sus amigos y devolver su pueblo a la normalidad, la pareja más intrépida de YouTube (Willy y Vegetta) se enfrentará a todos los peligros, acompañados por sus divertidas mascotas, Trotuman y Vakypandy. ¡Y por ti, que podrás dejar tu firma en sus aventuras a golpe de lápiz!”.
El canal que ha hecho célebres estas obras, sin embargo, es desconocido para otros asistentes a la FIL, quienes prefieren a Haruki Murakami y su tan solicitada Hombres sin mujeres (Tusquets, 2015). (I)