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El Telégrafo
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Ignacio Loor Vera cuenta a sus antihéroes y fracasos

El autor que se integra a las filas de la editorial mantense Tinta Ácida termina actualmente su carrera de comunicación social. Trabaja en El Delfín.
El autor que se integra a las filas de la editorial mantense Tinta Ácida termina actualmente su carrera de comunicación social. Trabaja en El Delfín.
Foto: Leiberg Santos / El Telégrafo
26 de marzo de 2018 - 00:00 - Redacción Cultura

La primera novela que Ignacio Loor Vera (Calceta, 1993) terminó se perdió traspapelada, luego de que el editor de la editorial Mar Abierto decidiera publicarla. Tenía 18 años y se animó a enviar sus textos, pero finalmente el editor murió, la editorial cambió de oficinas y él no volvió a encontrar lo que había escrito en su disco duro, aunque aún recuerda exactamente las imágenes con las que todo inicia.

Siete años después este autor, aficionado a la literatura desde adolescente, publicó su primer libro de cuentos La fiesta del fracaso, con la editorial Tinta Ácida. Lo hizo porque no quería traicionarse a sí mismo ni corregir los textos que escribió entre los 20 y 22 años por la eternidad.

“Creo que la clave de todo es borrar mucho, corregir mucho. Dejé enfriar estos textos, los leí unas 12 veces los leí, los corregí, tenía miedo a publicar, podía estar engañado de la convicción de que funcionaban y se los envié a Alexis Cuzme. A las tres semanas iniciaron un proceso de publicación.

Las historias de Loor no tienen desenlaces de héroes. Todos los personajes de sus novelas son antihéroes, personas que se traicionan a sí mismas, como el jugador de fútbol que promete ser la estrella del equipo, pero no tiene miedo de llamar a putas a su habitación en plena concentración.

Todos los personajes fracasan porque su autor cree que el fracaso nos hace reales, nos hace conocernos. “El éxito, en cambio, nos llena de artificios. El éxito siempre es muy relativo. ¿Qué es exitoso? El que vende mil libros escribiendo mierda o el que no vende escribiendo bien. Cuando fracasas la gente te mira como realmente es, se aleja de ti”, dice Loor en una entrevista con este diario. Él prefiere los antihéroes. “Ninguno termina salvándose”.

En el libro, además, hay varias señales de una paternidad fallida. Está el hombre que cría a su hijo, pero trabaja todo el tiempo y a pesar de la presencia constante en sus mayores éxitos, hablan muy poco. Está también el padre drogadicto. El padre de Ignacio Loor murió cuando él era un niño. Lo recuerda con un libro bajo el brazo y como un ser que se ha ido transmutando en su trabajo literario.

A pesar de que en sus cuentos también aparece la figura de la madre, siempre es más fuerte e impactante la del padre. A través de estos relatos, más que pensar en un contexto geográfico piensa en que sus historias pueden ocurrir en cualquier lugar del mundo. “La geografia es solo la estructura, pero la carne son los personajes”.

Su trabajo literario está filtrado por lecturas de autores como Albert Camus. “Yo pensaba que para ser escritor tenía que contar hstorias inmensas, pero Camus escribía sobre lo cotidiano y encontrarlo me ayudó a pensar en otra realidad”.

El escritor quiteño Édison Paucar, considera que Ignacio Loor Vera ha escrito una ópera prima sincera y cruda. “Con una prosa clara, el autor dinamita la monotonía urbana que nos acecha, desprendiéndole sus pedazos más ásperos para mostrar, con mucha fineza, el lado más sombrío de nuestra sociedad”.

El autor de La fiesta del fracaso presentará su primer libro de cuentos el viernes 6 de abril, a las 20:00, en La Caverna Burger & Books (Calle 20 av. 11), en Manta. La presentación de esta obra estará a cargo de Patricio Lovato y algunas lecturas. (I)

Su libro
La fiesta del fracaso
La novela se presentará el próximo viernes 6 de abril, a las 20:00, en Manta.

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