Ignacio Carvallo, un gestor de la cultura local

Ignacio Carvallo Castillo (Guayaquil, 1937) desarrolló una carrera literaria desde los 60 junto a escritores como Rodrigo Pesántez Rodas, Gonzalo Espinel, Ana María Iza, Antonio Preciado, Euler Granda, entre otros. Trabajó durante 40 años en el colegio Aguirre Abad y se destacó por su trabajo en la gestión cultural desde la educación básica. Este viernes, 28 de agosto, sus familiares confirmaron su fallecimiento tras un proceso de deterioro en su salud por desnutrición.

En los 70, tras pocos años de haber iniciado su carrera docente, promovió las actividades culturales de varios colegios de Guayaquil al crear y gestionar el trabajo de los Clubes Juveniles de la Unesco.En ellos se difundían actividades artísticas como pintura, poesía, periódicos murales, música, oratoria y otras disciplinas.

Carvallo se doctoró en historia, especialidad interpretación social de la literatura y las artes visuales. Contribuyó con su conocimiento en publicaciones a través de distintos estudios publicados en Cuadernos Hispanoamericanos (Madrid), Corriere Literario Latino (Roma), Lírica Hispana y Galaxia: Revista de Vanguardia (Caracas), Testimonio (República Dominicana), Instituto Iberoamericano de Berlín (Alemania), y otros más.

Entre las condecoraciones que recibió se destacan la Medalla Nicolás Copérnico otorgada por el gobierno de Polonia por su trabajo educativo con la Unesco, en el año Internacional de Copérnico en Guayaquil, realizado con la participación de alumnos de los colegios Alemán Humboldt y Aguirre Abad.

En 1962 obtuvo el Primer Premio en el Festival Nacional de las Letras de la Universidad de Guayaquil con el poema: Los Niños de mi Pueblo.

Obtuvo el primero y el tercer Premio en el Concurso Nacional de Poesía Ismael Pérez Pazmiño con su trabajo Ecuatorial y Perfiles de la Noche, respectivamente. En ‘Ecuatorial’, el autor destaca la geografía y el enigma del oriente ecuatoriano.  En su obra literaria se destacan estos temas “Porque mis dedos rasgan el misterio de la selva, la sombra ecuatorial se cierra sobre mí (...) Ruedan mis puños hacia el enigma de la noche y parten su máscara a golpes y llamas”.  

Años más tarde recibió el Primer Premio en el Concurso Internacional de Ensayo sobre Rubén Darío, promovido por el gobierno de Nicaragua, y su estudio ‘Ayer y Hoy’ sobre el poeta fue editado en libros de bolsillo por el Ministerio de Educación de ese país, con prólogo del Dr. Fernando Alegría, embajador de Nicaragua en Ecuador.

Por más de diez años fue asesor de la Revista Interamericana de Bibliografía publicada en Washington por la OEA. (I)