Galo Galecio dibujó el realismo afro
Cuando los grabados del artista ecuatoriano Galo Galecio (Vinces, 1906-1993) se exhibieron en el libro Tierra, Son y Tambor. Cantares negros y mulatos (1945), de Adalberto Ortiz, se evidenciaba un acercamiento al universo afro.
Un año más tarde, el artista incluyó 13 de estos grabados, junto a 17 adicionales, en el álbum Bajo la línea del Ecuador, con un tiraje de 100 ejemplares, publicados en México, donde residía por una beca.
En los grabados se aprecia la visión de Galecio, tanto del imaginario afro como del montuvio del Ecuador. Este material es la llama de la muestra que inauguró el Centro Cultural Benjamín Carrión (CCBJ) de Quito, Bajo la línea del Ecuador, Galo Galecio y el universo afro, que estará abierta hasta el 30 de septiembre.
La exposición bibliográfica referente a la literatura afroecuatoriana complementa la muestra con textos de Antonio Preciado y Nelson Estupiñán Bass.
Las xilografías expuestas son del álbum 21 (de 100) que Galecio obsequió al escritor Benjamín Carrión (Loja, 1897-1979). El centro cultural ha custodiado la obra que presentó por primera vez en 1998.
Romina Muñoz Procel, curadora de la muestra, plantea una provocación entre el interés de Galecio por el mundo afro, poco explorado, y los archivos que alberga el centro cultural. Entre ellos aparecen los planteamientos afros de autores como Nelson Estupiñán Bass (1912-2002) y Adalberto Ortiz (1914-2003).
Según el investigador Álvaro Alemán, estos autores del realismo social usaron estrategias de invisibilidad/visibilidad. “Dan visibilidad a una realidad operando desde una cultura invisible”.
Para Muñoz, Galecio quiso poner en discusión lo que realmente está Bajo la línea del Ecuador. No se conocen las razones de su proximidad con autores como Estupiñán y Ortiz, pero Galecio entra en la lógica de ver lo rural más allá de lo montuvio y lo indígena como recurso para configurar “el arte nacional”; y pone en evidencia a un pueblo que quiere defender sus derechos.
Con la relación que Muñoz establece entre los archivos documentales y los grabados de Galecio, también plantea explorar un mundo desconocido y repensar cuánto de esto han archivado los repositorios nacionales.
Entre los títulos de los grabados constan Selva y hombres, Casa Montuvia, Sangre en el cauchal, fruta macabra y Música Negra.
Galecio plasma la comunidad afro a través de sus varios oficios, en la naturaleza, e incluso con personajes míticos como La Tunda, con los que representa los imaginarios de ese tiempo.
Muñoz trabajó en la investigación y elaboración de textos del catálogo de la exposición por un mes, en el que le saltó esta pregunta.
Galo Galecio nació en Vinces (provincia de Los Ríos) en 1906 e inició sus estudios en la Escuela de Bellas Artes de Guayaquil, en 1925. Entre los años 20 y 30 se desempeñó como caricaturista en revistas y también fue ilustrador gráfico de la página literaria de Diario EL TELÉGRAFO. En 1942 inició una larga carrera docente. (I)