Elina Manzano y Yasmine Yaselga, ambas directivas del Conservatorio Nacional de Música Antonio Neumane no tienen claro por qué en las   reuniones sobre el proyecto Universidad de las Artes, realizadas en el ITAE, no se integrara al centro formador de bachilleres en artes.

Manzano, quien en algunas oportunidades ocupó cargos directivos en el conservatorio, sostiene que  el instituto  es vital en la cadena educativa porque de allí   saldrán bachilleres para dicha universidad.

Antes del 70 estuvo adscrito a la Facultad de Filosofía de la Universidad de Guayaquil y luego -debido a la complejidad de los estudios coordinados por profesores nacionales y extranjeros, solo se graduaron 21 personas-  pasaron a formar parte del Ministerio de Educación, pero no perdieron su característica de nivel superior. La entidad reconocía los niveles inicial y medio que daba el bachillerato. Y posbachillerato en música, del nivel superior que, hasta hace   poco incluso, existió según el reglamento de conservatorios.

Cuando estuvieron bajo la responsabilidad de la Universidad de Guayaquil para obtener un título se estudiaba 15 años. Bajaron a ocho años por pedido del Ministerio de Educación. Dos años eran de posbachillerato en arte,  de acuerdo al reglamento especial de conservatorios. Según Manzano, 8 les parecía   poco y lo dejaron en  9 años. Les preocupaba bajar de calidad.

Para la también maestra de piano, el Conservatorio Nacional de Música Antonio Neumane es el único del Ecuador que logró, bajo el reglamento especial para este tipo de entidades, otorgar los títulos de concertista y de profesor de educación musical para los colegios.

Ella dice que lo que da nivel es el título de licenciatura. El bachillerato sería el paso previo para acceder a la carrera universitaria. Le preocupa que, en la última reunión en el ITAE, Freddy Peñafiel, funcionario del Ministerio de Educación, anunció que al menos unos 28 colegios van a otorgar un título similar al que provee el Conservatorio Neumane, amparados en la figura del Bachillerato General Unificado.

Más allá de todo Manzano ya hizo la solicitud para poder otorgar títulos de tecnólogo y técnico, pero hasta el momento no se aprueba su petitorio. Esto porque luego de obtener el decreto ejecutivo que creó el Conservatorio Neumane, independiente como lo es ahora mediante un largo proceso de investigación, las autoridades cuestionaron por qué el Antonio Neumane no aparece en ninguno de los documentos. Allí el Ministerio  de Educación los reconoció como Conservatorio de Música y de Declamación Antonio Neumane.

“Nosotros queremos que la labor que ha realizado durante años el conservatorio sea tomada en cuenta como eslabón que sirva para lo que es la continuación, no como algo que desaparezca y que sea reemplazada por institutos en donde no está la formación completa que se viene dando o por colegios técnicos que solo abarcan 3 años. Lo que sí queremos, que siempre ha sido nuestra aspiración inclusive, es que cuando se formaron carreras de arte en universidades particulares se considerara a todos los bachilleres graduados en los conservatorios como alumnos exclusivos para las universidades de arte”, indica Yaselga.

El esqueleto del conservatorio

La institución educativa recibe estudiantes desde los 7 ó 9 años en adelante para que cursen 3 años iniciales y luego los 6 años continuos para obtener el título de bachiller, indica  Ingrid Abad, vicerrectora encargada del Antonio Neumane.

En especializaciones como canto ingresan personas adultas porque necesitan tener su voz formada, luego de audiciones se recibe a estudiantes de entre 18 y 25 años, actualmente la instrucción de instrumentista y las materias teóricas que complementan la formación de bachiller se complementan con la integración a la Orquesta Sinfónica Juvenil José Barniol , que desde este año dirige el maestro Manuel Campos; el Coro del Conservatorio, a cargo de Yasmine Yaselga, y el Coro de Niños, dirigido por la maestra Pilar Delgadillo.

Sin integrarse en los años iniciales, un joven de 12 ó 15 años puede ingresar por un año de preparatoria junto con la especialización, luego del examen de admisión, para después pasar por el proceso de 6 años para el Bachillerato en Artes.

El título lo  obtiene luego en conciertos de grado con tribunal y abiertos al público, sustentación de trabajos de investigación ante un tribunal, exámenes de grado en 4 asignaturas principales que ven por más de 2 años.

Ya que el conservatorio da un bachillerato complementario según   la Ley Orgánica de Educación Intercultural, en el artículo 44 literal b, debe exigirle a los graduados que presenten el título de bachiller del colegio en que estudian.

Este año tienen más de 1.150 matriculados en varias especializaciones. Las clases se imparten en 2 jornadas, el grupo minoritario está en la matutina, de 07:00 a 15:00, aunque este año se abrió por primera vez el Primero Inicial a cargo de la vicerrectora; en la vespertina, el personal trabaja de 12:00 a 20:00.

Inclinados a un Bachillerato General Unificado

El caso del Colegio Fiscal de Bellas Artes “Juan José Plaza” es complejo, dice su rectora encargada, Fátima Ampuero, que participó de la última reunión sobre la Universidad de las Artes en el ITAE.

La sección matutina es la más numerosa con más de 360 alumnos y hay nocturna, que recibe bachilleres para estudios exclusivos de arte, hace algunos años   aún el colegio era conocido como Escuela de Bellas Artes y todavía  es mencionado así popularmente, pero en 1972 se creó el colegio porque se vio la necesidad de que los alumnos que egresaban  tuvieran algún título que les permitiera ingresar a la universidad.

Se veían materias de arte y las de cultura general que permitían al graduado ingresar a  carreras afines, a las que podían acceder porque llevaban una base del Bellas Artes, pero con el Bachillerato General Unificado en primero y segundo de bachillerato solamente tienen 10 horas de arte. La educadora ve que la educación del artista desde su base, incluso ha dado frutos en el ITAE, pero el buen nivel depende del esfuerzo de cada persona, no catalogaría a la institución.

Ahora los estudiantes se retiran porque ya no es el colegio de artes como antes porque no están recibiendo Anatomía artística, Teoría de color y no se puede enmarcar en 3 horas, porque de las 10, 2 corresponden a materias de 3 horas y 2 materias de 2 horas, toda la formación de un creativo.

Aunque, describe Ampuero, en el tercero de bachillerato se mantengan 25 materias de arte. 

Ampuero agrega que  las bases se pierden e incluso quienes lleguen a la Universidad de las Artes tendrán grandes vacíos porque si algo enseña el modelo actual es que no hay especialización, sino amplitud lo que no dará un buen producto.

Gioconda Minervini, directora del Instituto Nacional de Danza Raymond Maugé Thoniel, donde actualmente se forman 430 alumnas, dice que quieren ser  instituto superior.

Respecto a la Universidad de las Artes  no fueron partícipes de ninguna de las reuniones. Allí les preocupa que los pénsum se elaboren omitiendo participación de las diferentes instituciones artísticas y que, por ingresar personas y justificar su creación, admitan alumnos sin un bachillerato en artes. 

Las estudiantes ingresan gratuitamente -solo pagan uniformes de diario y de práctica- con mínimo 7 años y máximo 11 años; los estudios se realizan en 9 años divididos en 3 de ciclo inicial que viene a ser de suela (básico), 3 de ciclo básico y 3 de ciclo bachillerato que le complica la organización acorde a los años de escuela que manejan los ministerios de Educación y de Finanzas.