Festival de cine con tinte hispano
El Festival Internacional del Cine de Roma, que dará comienzo el próximo 8 de noviembre, está caracterizado por la multitud temática que dotará al evento de una “esquizofrenia domesticada”, explicó ayer su director, Marco Müller, durante la presentación de la cita cinéfila.
Se trata de la VIII edición de un festival “en constante desarrollo” y que, con su carácter festivo y a pesar de su juventud, pretende situar a Roma “como una de las capitales del cine del mundo”, en palabras del presidente de la fundación del Cine de Roma, Paolo Ferrari.
Este festival, que se celebra a orillas del río Tíber, contará con proyecciones de 30 países y tendrá un tinte hispano con la exhibición de películas españolas y latinoamericanas. De estas producciones, 18 filmes han sido seleccionados por el jurado, presidido por el cineasta y guionista estadounidense James Gray, para optar al Marco Aurelio de Oro, que premiará a la mejor película y la carrera, que este año y por primera vez en los festivales europeos, recae a título póstumo en el director ruso Aleksej German, quien falleció el pasado febrero.
El evento, financiado con siete millones de euros, explicó Lamberto Mancini, director general de la Fundación Cine para Roma, tendrá otra cita con el cine español, esta vez fuera de concurso, con la presentación de la última película de Álex de la Iglesia Las brujas de Zugarramurdi. El festival recordará también los 20 años de la muerte del director italiano Federico Fellini.