Martine Franck, la gran fotógrafa belga, viuda del también fotógrafo Henri Cartier-Bresson, murió en París a los 77 años.

Su infancia la pasó entre el Reino Unido y los Estados Unidos. Estudió Historia del Arte en la Universidad Complutense de Madrid para luego volver a París e involucrarse en la escuela del Louvre.

Hizo una fotografía de tipo clásico, ligada a las grandes tragedias de la segunda mitad del siglo pasado, la guerra de Vietnam, los movimientos de liberación de los países africanos. Además cultivó otras artes, como el teatro.

Entre el 2003 y 2004 realizó un trabajo de documentación para el director Robert Wilson, que montaba las fábulas de La Fontaine en la Comedia Francesa.

En los ultimos años estaba involucrada en un proyecto del grupo de Magnum, en varios países como Georgia, India, Japón.

El pueblo de Luberon, en Francia, el mismo lugar donde reposan los restos de su esposo, acogerá a la destacada fotógrafa.