Falconí crea paisajes interiores
“Las hojas, enredaderas y juegos de sombras los cuales dibujo o formo, tratan de expresar esperanza, y sentimientos fuertes así como heridas. duelos, temores. A veces reina una sombra e impasable angustia en la cortina selvática. A veces se cola la luz del sol y emerge de entre las hojas de colores incandescentes”, expresa Lucía Falconí sobre su propuesta para la exhibición Sobrenaturaleza. Esa muestra, que completan las piezas de Caroline Adams (EE.UU.), Alexis Gorodine (Francia) y Birte Pedersen (Noruega), está abierta desde ayer en la Galería Ileana Viteri (avenida González Suárez N 31-150, Edificio Atrium), en Quito.
El trabajo de Falconí se decanta como un claro intento por concentrar estados anímicos tales como alegrías y necesidades del alma en cuadros plá·sticos. Su paso por la Academia de Bellas Artes en Munich (2000-2007) es puesto a consideración del público ecuatoriano por primera vez en -un conjunto pequeño en relación a su vasta producción, de acuerdo a los conocedores- esculturas con materiales tradicionales y contemporáneos, grabados, litografías, y una gran instalación que incluye dibujo de medios mixtos y cerámica sobre la pared, a ratos desbordante y en otros casi tímida o tierna, con la riqueza de la naturaleza.
Su obra es parte de al menos 7 colecciones de arte, entre ellas la Colección de Arte de la Oficina de patentes Europea en La Haya y la Colección del Consorcio BMW, Alemania. Muestras públicas de su arte pueden ser vistas en la Casa de Mujeres “Am Ackermannbogen”, Munich y el Consultorio médico “am Altheimer Eck 13” en la misma ciudad. En Sobrenaturaleza su enfoque son los paisajes interiores.
