El 30 de septiembre de 2010, además de sus connotaciones políticas y sociales, y el sitio que ocupa reciente  en la historia del país, ha motivado una serie de actividades culturales en el territorio nacional. La primera fue Arte Público: “Muestra fotográfica 30S”, que presenta gigantografías, de 2x1,50, con imágenes de los hechos ocurridos aquel día, en las áreas externas de los museos del Ministerio de Cultura, a la que, desde el jueves, se sumó la muestra fotográfica 30-S Memoria y Testimonio, en Guayaquil.

Las gigantografías se presentan, desde el pasado 16 de septiembre hasta el 16 de octubre, en Quito, Guayaquil, Cuenca, Ibarra, Loja y Bahía. Mientras que la exposición abierta la pasada semana comprende una actividad de la Red Nacional de Memoriales Públicos de Conciencia del Ministerio de Cultura, elaborada con una recopilación testimonial ciudadana, de hombres y mujeres, que presenció los hechos del 30 de septiembre de 2010 y que, desde sus propias vivencias, invita  a reflexionar sobre el ejercicio pleno de la democracia en un escenario de violencia, inestabilidad y tragedia.

Las fotos que componen 30-S Memoria y Testimonio reposan en la Sala Autoral del Museo Antropológico y de Arte Contemporáneo (MAAC) del Centro Cultural Libertador Simón Bolívar, en Guayaquil, hasta el 8 de noviembre.

En la jornada inaugural de esta exhibición un considerable número de ciudadanos, en su mayoría jóvenes, no solo observó las imágenes como una obra de arte más o ejemplo de fotoperiodismo, sino como una parte de la historia política nacional. El propósito de ambas muestras fotográficas es mantener las visiones de lo que significa el 30-S.