El señor presidente cumple 70 años de su primera edición

El escritor guatemalteco Miguel Ángel Asturias (1899-1974) participó en los levantamientos de su país que en 1920 permitieron derrocar a Manuel Estrada Cabrera -fichado en la historia como un sanguinario- de la presidencia. Cuando el Congreso lo declaró incapacitado para ejercer su mandato, Asturias inició prácticas en el juzgado como abogado y entrevistó al derrocado, mientras estaba en prisión domiciliaria.

Del intercambio que se genera entre el pasante y el expresidente, Asturias logró la publicación del retrato -considerado entre los más brillantes- sobre el dictador, El señor presidente.

La obra fue concebida inicialmente como un cuento para ser publicada por la prensa local bajo el título Los mendigos políticos, pero nunca vio la luz, según el ensayo El señor presidente en opinión de contemporáneos de Asturias, del crítico literario Ariel Batres. A finales de 1920, Asturias viajó a Londres y llevó consigo el original del cuento. En 1924, ya en París, empezó un proceso de reescritura. El cuento se convirtió en novela y lo llamó Tohil, en alusión a un dios que en la mitología maya exigía sacrificios humanos para saciar su sed de sangre.

Al regresar a América en 1946 llevó su obra al Fondo de Cultura Económica en México, donde rechazaron su publicación por ir en contra de la línea editorial de la empresa. “Llévese a su señor presidente a otra imprenta”, fue la respuesta del editor, con lo que se ideó el título final de la obra que lo hizo ganar el Premio Lenin en 1966 y el Premio Nobel de Literatura un año después. (I)