EL AUTOR DE TUBUlLAR BELLS VUELVE A LA PRODUCCIÓN DE ESTUDIO
El nuevo álbum de Mike Oldfield ‘está totalmente vivo’
La última aparición virtual del músico británico Mike Oldfield fue su porción de homenaje en la apertura de los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Hoy este músico de estudio y experimentación presenta su vigésimo quinto álbum Man on the rocks.
Para algunos la referencia más inmediata a la música de Oldfield podría ser Tubullar Bells (1973), la canción que se usó en la película El Exorcista, pero que musicalmente es mucho más que el agregado de una escena de terror. Este disco lanzó a Oldfield a la escena de grandes autores y es considerado uno de los más relevantes del siglo XX.
En su nuevo disco, luego de seis años de haber lanzado Music for the speres (2008), el músico confiesa las influencias de su retorno a los estudios, pues varios medios rumuraban su retiro.
"Ha tenido mucha importancia experimentar con mi guitarra eléctrica en una afinación de Sol abierto, que es la que usan los intérpretes de blues. Estuve escuchando muchos artistas antiguos del género y los primeros discos de los Rolling Stones, con la idea de hacer un disco de este estilo", resaltó Oldfield en una entrevista con Darío Prieto, de Diario El Mundo. Con este disco deja por sentado sus ambiciones en la música, que sin dejar los rasgos de lo clásico, se desvincula de las rebuscadas reformulaciones estructurales o instrumentales a las que ha acostumbrado a sus seguidores a lo largo de su dilatada carrera, con la salvedad de ejercicios puntuales más pop.
Para los expertos este nuevo trabajo se distancia de los anteriores del músico sin que por ello pierda su identidad. "He hecho 25 discos en muchos estilos diferentes y siempre he terminado regresando a mi guitarra", aseguró Oldfield, quien resalta que ese instrumento, con el que músicos como el recientemente fallecido Paco de Lucía marcaron un hito, es el mismo con el que él busca “dejar algo de música cuando me vaya”. Oldfield inserta en su último disco una banda de estudio tocando en directo, con batería, bajo, guitarra, voz y teclados, sin sintetizadores. Para el efecto no abandonó su estudio en Las Bahamas, pues dirigió las sesiones en Los Angeles mediante un sistema de cámaras por skype. Más allá de lo que podrían esperar sus seguidores, Oldfield lanza su disco, pero ha dicho que no volverá a los escenarios.