Dos Mujeres, una comedia en la que subsiste un drama profundo
Alejandra y Clara se esmeran por lucir bonitas para recibir a un extraño que contactaron a través del anuncio de una revista, en su casa. Ellas están ansiosas de huir de la soledad en la que viven. Para cautivar al galán decoran la mesa con candelabros poblados de velas rojas y flores para que el ambiente sea más romántico.
Mientras se preparan para recibirlo, el miedo, las expectativas y la desconfianza aumentan al grado de ponerlas muy nerviosas.
La obra Dos Mujeres, que se pondrá en escena en Pop Up Teatro Café, el próximo 5 de abril, se trata de una breve y divertida mirada sobre la ansiedad que nos provocan los otros. Montse Serra es la directora de esta pieza teatral que dura 15 minutos y se desarrolla en clave de humor. “Como siempre digo, detrás de una buena comedia subsiste el drama más profundo”.
Montse Serra trabajó un texto del autor argentino Javier Daulte para esta nueva puesta en escena que, aunque es una adaptación, respeta la obra original íntegramente.
Sobre el formato de miniteatro, Serra considera que ya hay un público fiel desde hace tres años, aproximadamente, cuando se inició con esta nueva modalidad de la mano de Jaime Tamariz con Microteatro Gye, el cual fue un éxito.
“La cercanía con la gente y el valor módico de la entrada son aspectos que contribuyen a consolidar el formato. Actualmente hay otros espacios que también ofrecen teatro breve o miniteatro como Pop Up Teatro Café, El Altillo Café Cultural, etc”, dice Serra, quien también ha dirigido las obras Un dolor infinito, de David Schulner (2015) y El Plan, de Ignasi Vidal (2016). Este último trabajo, presentado en Casa Cino Fabiani, tiene como eje central la fraternidad y hasta dónde se es capaz de llegar por un amigo.
“Intento abarcar todos los aspectos de la producción teatral, desde la dirección, la actuación, la realización y comercialización tanto de obras propias como ajenas. Creo que el teatro está en todas partes, no solo en un local adecuado para ello”, dice Serra, quien empezó en 1994 a formarse como actriz, en Barcelona, España.
Dos mujeres se encuentran en una comedia existencial
Florencia Lauga interpreta a Clara, una mujer seductora, torpe, bondadosa y levemente fuera de cordura. La actriz cuenta que en escena el espectador podrá observar un momento en la vida de dos amigas que se aman profundamente y que viven acosadas por las normas que habitan en la sociedad.
Lauga trabaja como actriz desde los 9 años. Además, es locutora, doblajista y escritora. Tiene una amplia experiencia en teatro, incluido el formato musical. El pasado enero estrenó No me olvides, Margarita, una obra de su autoría.
La otra intérprete, Frances Swett, encarna a Alejandra, quien lleva una vida monótona pues sus actividades diarias se resumen en trabajar y dormir. Entre sus cualidades se destacan ser organizada y meticulosa. También le gusta preocuparse por su aspecto personal, por la forma en cómo se expone al mundo. Es una mujer solitaria y, a sus 38 años, nunca ha tenido un encuentro íntimo con un hombre.
Swett empezó a actuar de forma profesional a los 21 años, en Estados Unidos, donde hizo una especialización en Artes Escénicas. (I)