Desde el pasado domingo hasta mañana serán los ensayos generales de la  Misa en La Mayor, de Gabriel Rheinberger, obra sinfónica coral escrita exclusivamente para voces femeninas, que pondrán en escena  los cuerpos femeninos de los coros de la Casa de la Cultura, Núcleo del Guayas (CCNG), y de la Universidad de Guayaquil con el acompañamiento musical de la Orquesta de cámara del Instituto Experimental de Música de la Universidad de Guayaquil. Desde ayer son entre 2 y 2 1/2 horas por noche, en la Casona Universitaria, para  mañana hacer un repaso en el Paraninfo de la Casona. Las presentaciones serán en el Auditorio Enrique Gil Calderón, de la CCNG (9 de Octubre y Pedro Moncayo, piso 5), a las 20:00, y el 19 de abril, en el museo Nahim Isaías, a las 19:30.

El domingo, hasta las 18:00, se practicaron los 5 números de la obra, los mismos de la misa ordinal, Cristo ten piedad, Señor ten piedad, Gloria, Credo, Santo y Bendito y Cordero de Dios; con especial énfasis en el Credo. Los directores de los conciertos serán -en la primera parte de la obra- Fernando Gil, mientras que para la segunda parte el  invitado es el maestro Maximiliano Mancuso.

Juan Carlos Urrutia, director del Coro de la CCNG, es el director general del evento y explica que la Universidad y la Casa están haciendo un gran esfuerzo para estas presentaciones, con recursos limitados para impresos, como un aporte cultural a la ciudad con los coros y un reconocido maestro argentino.

Mancuso llegó ayer y ya ensayó con los coros y orquesta por la noche. Viene como amigo de Gil y Urrutia, a quienes invitó a participar con los coros que dirigen, el de la Universidad y el de la CCNG, en el festival que codirige con su padre, Mario Mancuso, Buenos Aires Coral.

Para Urrutia, lo más interesante del programa es que combinarán a un gran maestro con un coro femenino, cuerpo que muy rara vez se presenta localmente, y con una obra única del romanticismo alemán que permite hacer pautas nuevas en Guayaquil.

El coro femenino cautiva y Ginger Arreaga, integrante del Coro de la CCNG desde hace 10 años, que cantará como contralto, revela que han estudiado la misa desde hace un mes en conjunto con el repertorio usual de su elenco.

Para ella, todas las voces son importantes porque se acompañan o complementan unas a otras y esta será la primera vez que canten solo mujeres. Para Manuel Mendoza, violinista que integra la orquesta desde hace 2 años, califica de placentero y muy especial la posibilidad de combinar voces y orquesta en obras sinfónico-corales, como la misa que ensayan, de gran magnitud y calidad, avalada por un trabajo bien hecho con tiempo, amor y conocimiento. Las dinámicas y lecturas de partes las ha hecho Gil con los instrumentistas en 3 sesiones, pero ellos siempre están en los ensayos.

Para Olga Cazorla, soprano del Coro de la Universidad, desde hace 3 años, lo que importa es que se consoliden las trayectorias de los coros y que hagan que el público guste de su arte, la cultura y eventos de élite. Gil reconoce que participa con el fin de exponer el trabajo del coro y orquesta de la Universidad, dirigidos por él, con cierto protagonismo.