De nuestro primitivismo y otras cuantas taroladas
Somos primitivos, no cabe la más mínima duda. Nuestro comportamiento lo demuestra. Con hechos, no con palabras, pero también con éstas. Por eso decimos “no es posible que podamos” y “unos me entienden y otros también no me entienden”. O “llueve despacio” y “llueve duro” (¿será posible?), comí “bastante” , “vuelvo a repetir” y “para evitar que no se repita”.
Pero lo que hacemos es de lo más triste. Somos campeones en accidentes de tráfico. Tenemos choques y volcamientos al granel, conducimos mal y las carreteras del país muestran los choques más insólitos: una bicicleta con un trailer, una moto con un autobús, un automóvil con una avioneta, carros contra postes, casas, letreros, burros, vacas, en fin, con lo que sea; rebasamos por la derecha, no respetamos los límites de velocidad. Nos quedamos dormidos por manejar cansados y con frecuencia ebrios o chuchaquis. Nuestros noticieros pasan de un accidente a otro, son el pan nuestro de cada día. La crónica roja es nuestra guadalupana.
Para colmo, nuestros migrantes trasladan estas “virtudes” (y otras), con peores consecuencias, a los lugares donde llegan: provocan choques múltiples, les pegan a sus convivientes, maltratan a los hijos, se ven envueltos en crímenes pasionales, viven escandalizando con el primitivismo de su conducta.
Eso sí, son trabajadores: no le hacen el quite al camello, tampoco al dromedario con su jornada (joroba) única.
Y somos “emprendedores”, un ejemplo de lo cual es haber hecho licores usando alcohol industrial, en el caso metanol, que se extrae de la madera, se utiliza como disolvente o aditivo para combustibles y es un veneno del carajo.
Total, la gente (¿?) se zampó esos tragos y en unos diez días, como cincuenta fueron a dar al cementerio; los que tuvieron suerte, o chuparon menos, se quedaron ciegos.
Pero los autores de esta monstruosidad, de este asesinato colectivo, envasaron varios tipos de licores: “Lima-Limón Fiesta”, “Vino San Francisco”, “Vino Tentador” (frutilla y durazno), “Vino San Roque Moscatel”, “Licor Z-1”,”Vino Tres Marías” y “Licor Brandyla Light”, según las autoridades de Salud.
El lío sigue porque los tenderos que compraron los licores metanolizados se niegan a entregarlos a las autoridades, porque no quieren perder lo que pagaron por ellos.
Total, que el Estado, que ha establecido la ley seca en Los Ríos, Bolívar, Azuay, Esmeraldas, Manabí, incluso en Pichincha y Guayas, para evitar más pedos (jumas) mortales, van a comprarle a los tenderos sus existencias de licor adulterado para sacarlo del mercado. También aplicará sanciones penales a los tenderos que vendan sus existencias envenenadas.
Sin comentarios. Nuestro primitivismo (¿trogloditismo?) llega a extremos inauditos. ¿O no?
Y a veces rebasa los límites de la tragedia y cae, por su sobrecarga insólita, en la payasada, como el manaba que le puso al hijo Casimiro, porque era bizco; o el pollo (el animal, el hijo del gallo y la gallina), único caído (muerto) en una balacera, del que se hizo el levantamiento del cadáver y se lo guardó como evidencia de lo acaecido; también la agilidad de la aparición de Cuadernos del Guayas, revista de la Casa de la Cultura local, cuyo número doble (66/67) data de junio del 2008 y el próximo inmediato (¿?) salió en marzo del 2011, casi tres años después. De Ripley.
A pesar del tiempo empleado para editarlo, el ejemplar que me enviaron está mal encuadernado: entre las páginas 50 y 51 vienen seis repetidas de otro artículo. Intermedio futbolístico (un remanso para el cronista). Hora de almuerzo, juegan Barcelona (el auténtico) con Porto. La primera etapa termina uno a cero a favor de los catalanes. Porto (O Porto es El Puerto) no tiene la menor posibilidad de superar al Barca.
Messi genial. Marcó el primer tanto. En la segunda mitad un deslumbrante pase de la pulga construyó el segundo gol. Dos a cero y el Barca campeón de Europa.
El súper crack argentino es el mejor jugador del mundo por 53 votos contra 11 de su inmediato seguidor. Ahora la pregunta del millón. ¿Es Messi el mejor de todos los tiempos? ¿Mejor que Distéfano, Maradona, Pelé, Puskas, Pedernera, Rossi, Garrincha, Gerson, Cruyff, Jairzinho, Chompi Henríquez, Romario, Ronaldo, Lolo Fernández y todavía un etcétera prolongado, con Forlán, Perico León, Boyé, Spencer, Labruna, Perucca, Polo Carrera, Valderrama, Rocha, Figueroa, Aguinaga, Ronaldiño y así por el estilo?
Who knows? No se sabe, dice el cronista. Nunca se sabrá, responde un eco lejano.
Y basta de taradeces, es decir, de taroladas, recalca el que escribe, recordando a “Cabeza Mágica”, “Pata Bendita”, los “garnicazos” del Garnica, Italo Estupiñán (un tigre en el área), Bomba Atómica Guzmán: solo sabía patear con gran violencia; jugaba de centro estorbay…).