Christian Mejía compone desde lo universal

La música de ‘El secreto de la luz’, documental dirigido por Rafael Barriga y producido por Mayfe Ortega, no solo acompaña las escenas de un archivo de la memoria.

El soundtrack cinematográfico suele tener una función subliminal en las percepciones de sus espectadores. También puede contar su propia historia. En ambas vertientes se enfocó Christian Mejía para trabajar la música que acompaña una visión cinematográfica de la vida del ‘trotamundos profesional’ que documentó al Ecuador entre 1934 y 1968, Rolf Blomberg.

Christian Mejía es un músico ecuatoriano asentado temporalmente en la ciudad alemana de Freiburg. Desde allá continúa su especialización en música para cine, iniciada en Berklee Collage of Music.

Cuando terminó sus estudios en Estados Unidos volvió a Ecuador. Durante 12 años, trabajó en varios proyectos, uno de ellos fue su participación como integrante de la banda La Grupa.  

En 2013, 2 años después de la salida de Mejía a Alemania, hay un repunte en la producción de cine ecuatoriano, con un total de 13 películas estrenadas, según datos del Consejo Nacional de Cine.  

Para Mejía, este es un momento en la cinematografía de Ecuador en el que “hay que ponerse la camiseta”, pues además, la producción se empieza a profesionalizar.

Es en este periodo que Mejía hace su primer soundtrack en cine, para una película ecuatoriana.

Luego de compartir una serie de ideas de lo que debía sugerir la música del documental de Blomberg, Mejía empezó a plantearse sus parámetros para componer. Completó las hojas en blanco de su bloc de notas para darle forma y convocar los colores  de acuerdo a la dramaturgia de la imagen.   

En las 18 composiciones que trabajó el ecuatoriano, hay música contemporánea y ecuatoriana.

Mejía reúne a un conjunto de cámara que musicaliza desde distintas perspectivas una historia sobre el Ecuador. Un silbador francés, un músico africano, una percusionista española y una pianista china se integran al pensamiento universal de Blomberg sobre el Ecuador.

“Para mí siempre es satisfactorio hacer música ecuatoriana con músicos que no lo son, porque ellos te ayudan con su perspectiva”, dice Mejía. “Para ellos es un sonido diferente, les suena latinoamericano pero también les resulta que es algo que no habían oído antes, a pesar de que hay un tipo de conexión que hace que la sientan cercana, por los elementos europeos que la influencian, así como los latinoamericanos”, dice Mejía.

La música de Christian Mejía se ajusta a sus intenciones de proyectar la música ecuatoriana con una mente universal, al igual que lo que hizo Rolf Blomberg con Ecuador.