El fin del evento coincidió con el inicio de la Feria de Guadalajara, la más importante de habla Hispana
Chile será el próximo invitado de la Feria del Libro de Quito
La noche del lunes pasado, mientras los vendedores vaciaban las perchas del estand del Fondo de Cultura Económica (FCE), un puñado de lectores se agazapaba sobre los títulos que quedaban en busca de alguna novedad. Faltaban minutos para el cierre de la Feria Internacional del Libro de Quito y las obras de Carlos Fuentes, Octavio Paz o Carlos Monsiváis aún eran solicitadas en el vestíbulo del Teatro Nacional de la Casa de la Cultura Ecuatoriana.
La editorial mexicana fue el invitado de honor de la FIL 2014 y la entidad más destacada a la vez por la oferta libresca que trajo al país.
El resto de firmas comerciales tuvo espacios heterogéneos en los exteriores del teatro, en el Museo Etnográfico y en otras salas del ‘edificio de los espejos’, además de la casona. Sitios que, pese a la señalética dispuesta para el evento, a algunos asistentes les parecieron un laberinto difícil de recorrer en busca de libros o de las conferencias, funciones y proyecciones planeadas. Esa inquietud fue recogida por los encuestadores de la Cámara del Libro, cuyos resultados se publicarán en los próximos días.
No obstante, la ‘Breve historia contemporánea del Ecuador’, de Jorge Salvador Lara (1926 – 2012) y los ‘Cuentos completos’ de Miguel Donoso Pareja fueron las obras más vendidas en el estand de FCE que el miércoles 26 de noviembre fue visitado por el escritor Juan Villoro. Un auditorio lleno lo esperaba para el homenaje que le rindió a su maestro, autor de los cuentos que también se presentaron hace una semana.
Las cartoneras tuvieron un espacio detacado en la Feria y se impartieron talleres que mostraban su labor. Encuentros que llamaban la atención de los asistentes (unos 120 mil, según funcionarios del Ministerio de Cultura y Patrimonio) tanto como las narraciones orales de cuentos infantiles.
La escasez de libreros en la FIL
El criterio de selección de los libros que se ofertaron durante la Feria es casi arbitrario. Debido al espacio reducido que algunos estands tuvieron, los vendedores se limitaron a llevar los títulos más vendidos sin satisfacer la demanda de quienes buscaban textos en particular.
Librerías independientes como ‘Sur’ (Foto: Germán Gacio), ‘El Oso lector’, ‘Siglo de las luces’ o ‘Tolstoi’ fueron las únicas que tenían a un guía, un librero de verdad para la búsqueda de títulos.
El invitado de honor de la próxima edición de esta Feria del Libro, en 2015, será Chile.
