CBS busca imponer un hábito en la 55 entrega de los Grammy

El canal estadounidense CBS, encargado de emitir en directo la 55 edición de los premios Grammy, envió un e-mail a los invitados a la ceremonia solicitando que los “traseros y pechos femeninos estén tapados adecuadamente”.

“Por favor, asegúrense de que los traseros y los pechos femeninos estén tapados adecuadamente. Los trajes tipo tanga son problemáticos. Por favor eviten exponer carne desnuda por debajo del trasero. Los laterales desnudos o la piel por debajo de los pechos también resultan problemáticos”, sostiene el correo electrónico publicado por el portal Deadline y recogido ayer por medios de EE.UU.

Y continúa: “Por favor, eviten prendas con transparencias que puedan exponer los pezones de las mujeres. Por favor, asegúrense de que la región genital esté adecuadamente cubierta para que no haya partes sensibles al descubierto”.  

Al parecer, la CBS quiere evitar polémicos vestidos como el Versace verde de Jennifer López en la edición 42 de los Grammy. La cantante apareció escotada hasta el ombligo en 2000. O Lil Kim en 1999, cuando su pecho izquierdo no era tapado por el vestido, sino por un pastie, prenda también conocida como tapapezones.

Hay en el e-mail un lenguaje que resulta, a lo menos, extraño. Se prohíbe la transparencia para que no se vean los pezones en “female breasts” (pechos femeninos). Queda la duda: ¿Los hombres sí pueden ir sin camisa? “La obscenidad total o parcial en el vestuario es inaceptable durante la retransmisión”, se afirma de forma rotunda en un e-mail que hace siempre hincapié en el vestuario y las partes de las mujeres.

Dentro del mensaje están también incluidas las personas que asistirán a la ceremonia como espectadores.

En 2004, la CBS tuvo que llegar a instancias legales para evitar pagar una multa de medio millón de dólares, luego de que en la edición del Súper Tazón de ese año, televisada por la cadena, un pezón de la cantante Janet Jackson quedó al descubierto, en un show musical al medio tiempo que protagonizó con Justin Timberlake.  

Pink, en 2011, apareció vestida con lo que parecía un homenaje a Mila Jovovich en su papel de Leeloo en El Quinto Elemento. A Katy Perry le había pasado algo parecido en un capítulo de Plaza Sésamo rodado en 2010. Ahí cantaba Hotn Cold con un Elmo que se paseaba por sus piernas.

Perry no llegó a salir al aire por causa de su corsé dorado. Antes de la transmisión de ese capítulo, el video había sido subido a youtube, y muchos comentarios de padres lo consideraron impresentable en un programa de niños.

Claro, la entrega de los Grammy -que se va a realizar este domingo en el Staples Center, de Los Ángeles- no es un espectáculo infantil, precisamente...

No a la política

Pero las peticiones -o restricciones- van más allá de un planteamiento moral ante la desnudez -femenina- en esta nueva edición de los premios Grammy.

En el comunicado, enviado vía e-mail y titulado “Aviso de estándares y prácticas de vestuario de la 55 edición de los Grammy”, la cadena también ha recomendado a las estrellas que no lleven nombre de marcas en sus prendas. Y van más allá: si un mensaje está escrito en una lengua extranjera, el significado debe ser aclarado.

Finalmente, hay una prohibición expresa a cualquier tipo de manifestación política en el vestuario: Los invitados no deben lucir logos en camisetas o pines sobre ningún tipo de causa organizada o política.

Ya las recomendaciones sobre el vestuario suenan restrictivas. Sin embargo, la prohibición sobre causas políticas -que pueden incluir desde pines de los partidos estadounidenses hasta mensajes a favor del medio ambiente o en contra de la guerra-, dan cuenta de una cadena que se encuentra maniatada por el afán -¿o miedo?- de no ofender a nadie.

Paradójico discurso suele ser el de la censura. Más aún si se trata de pequeñas libertades individuales, como la elección del vestuario que uno se pone. Pero el diamante de esta sortija es, sobre todo, el hecho de que viene de uno de los medios de comunicación más conocidos en todo el mundo.