Añoranza Gitana evoca los recuerdos a través de la danza flamenca
La ausencia y la nostalgia, con toda la fuerza interpretativa de la danza española se juntan en la obra Añoranza Gitana, bajo la dirección de Adriana Mosquera, del grupo Fusión Flamenco.
La temporada inició la semana pasada, y este sábado 24 de noviembre tendrá su última función a las 18:00 en la Asociación Humboldt, ubicado en la calle Vancouver y Polonia de Quito.
El espectáculo dancístico incluye dos partes que son El Sueño de la Vendimia, y Añoranza Gitana, que titula a la obra. “El sueño de la Vendimina es una historia de amor, sobre un matrimonio arreglado. Ahí bailamos la Jota de la Dolores”, explicó Adriana Mosquera.
En cambio, en Añoranza Gitana, predomina la última danza Caza alcance, que es un poema de Juan de la Cruz, y cantado por Estrella Morente, como un homenaje a su padre. Lo que es perfecto para que aflore la nostalgia.
Un total de siete bailarines forman parte del show. Ellos son Geovanna Baquero, Fausto Caballero, Ana Cristina Córdova, Ramiro Cruz, Gabriela Pavón, Stephy Ponce, junto a la directora del grupo Fusión Flamenco, Adriana Mosquera.
Para Ana Cristina Córdova, bailar es un homenaje a un arte familiar, pues su madre también era bailarina. “De niña hice ballet, luego cambié hasta encontrar que el flamenco es lo mío”, recordó.
Además de la difusión de la música y el baile español, Fusión Flamenco explora la interpretación de distintos temas en los que se combina la elegancia y actitud del baile con la fuerza y ritmo del zapateado.
Una de las bailarinas más jóvenes es Stephy Ponce, quien recién se graduó del colegio, pero ya viene practicando esta disciplina 9 años.
Fusión Flamenco combina el arte del baile flamenco con la técnica de la danza contemporánea. “Es el show perfecto para iniciar las Fiestas de Quito”, dijeron. (I)