Andrés Vivar teatralizará su canto en El Altillo
Un concierto que mezclará las notas vocales de Andrés Vivar y su expresividad corporal marcará el recital de “Canto Performático”, que ofrecerá el próximo 31 de enero, a las 20:00, en el Altillo (Esmeraldas y Av. 9 de Octubre).
El cantante guayaquileño, a diferencia de otros artistas, busca una interacción fuera de lo común para entregar un espectáculo que integra la música del ayer en diversos géneros.
Al canto clásico le debe, en parte, esa soltura que tiene para interpretar boleros, baladas, rock en inglés en español, pasillos y hasta temas de música sacra.
Pero sus inicios distan mucho de las vivencias de otros músicos, pues su despertar al arte no sucedió desde pequeño, sino a los 16 años. A esa edad ingresó al Conservatorio Federico Chopin y después al Antonio Neumane, donde se graduó y fue abanderado.
Cuenta que es el único artista en su familia y aquel esquema conservador con el que fue criado lo llevó a seguir la carrera de Agronomía en la Universidad Estatal, de la que solo egresó.
Aunque asegura que la decisión se basó en su gusto por la naturaleza, específicamente de la Taxonomía que le permitió ser ayudante de cátedra de la materia de Entomología. Algo que habla mucho de su perfil en constante aprendizaje.
En el arte ha sido igual. No quiso quedarse como el típico cantante e incursionó en la danza contemporánea en Sarao, en la Fabrika y en el teatro, con Ariel Varela.
“Si yo no empezaba a dar pequeños pasos en la danza, no me hubiera graduado en el conservatorio. Porque la danza, el trabajo de estiramiento y el trabajo de relación corporal hizo que se despierte mi respiración y mi voz”, explica el músico de 33 años.
Una vez que palpó a su audiencia en vivo, entendió que la falta de atención del público era una constante que le afectaba, así que implementó el teatro y la danza con la idea de reforzar su interpretación vocal.
“Creo que a la gente le atrae lo que hago por aquello de la honestidad, creo que la interpretación tiene que ver con la forma en que llevo mi vida”, dice este artista que se expresa abierto y libre de hablar, sin complejos.
Asegura que del comportamiento y ánimo del público depende su dinámica en el escenario, sin establecer un orden del repertorio en cada presentación.
“En mi show busco las fuentes de inspiración que en este caso son personas ahí sentadas para que se abran y me entreguen la historia que han vivido y las emociones que quieren, no por sanar pero sí resolverlas a través de una canción”.
Vivar figura como voz de bajo, sin embargo, puede fácilmente manejar el contralto para cantar temas de los Bee Gees, canciones de Tina Charles, o de Elvis.
Así como de Miguel Bosé, Andrea Bochelli, del grupo Chicago, baladas en inglés y español del ochenta y hasta puede interpretar piezas del tono de María Conchita Alonso.
“También canto pasillos porque a mí me queda muy bien esto de ensalzar las raíces, la cuestión del amor, la familia y más”. (I)