Un “hechizo” lanzó  el grupo chileno Quilapayún, en el coliseo Rumiñahui, la noche del martes anterior, día del primer concierto del festival “Todas las voces todas”, que se produce después de 8 años para celebrar la primera década de la creación de la Capilla del Hombre.   

El hechizo consistió en cantar su canción “Malembe” y de esa manera “darle fuerte a esos cuatro generales que causaron tanta muerte”, dijo el vocalista del grupo, quien añadió que espera que con el conjuro no se repita jamás esa historia. “Para los traidores, Malembe. Para los fascistas, Malembe. Para los gorilas, Malembe, Malembe”, coreó el público que en su mayoría rozaba los 40 años.

El cubano Carlos Varela, después de dedicar sus melodías a Oswaldo Guayasamín y Facundo Cabral, quien falleció el año pasado, cantó para los cubanos que decidieron salir de la isla por diversas razones y radicarse en Ecuador.

Quimera fue el tercero en salir al escenario, que estaba lleno y que incluso contó con la presencia del presidente Rafael Correa, que acudió con su hija Anne Dominique. Junto a Correa estaba el titular de la Asamblea, Fernando Cordero, y otras autoridades ministeriales, como Érika Sylva, de Cultura; María Fernanda Espinosa, de Patrimonio; y Doris Soliz, de Inclusión Económica y Social, entre otras, que disfrutaban del concierto desde la primera fila.

Quimera recordó los 30 años de trayectoria que lleva como grupo musical y el compromiso que tienen al difundir el legado de Guayasamín, quien estuvo siempre preocupado por el “pueblo oprimido”.

Pero sin duda quien se ganó los aplausos fue el interprete de “Alevosía”, el español Luis Eduardo Aute, quien se refirió a la “paradoja tremenda” que vive acturalmente Grecia. “Grecia fundó Europa, la civilización occidental, fundó la democracia y hoy paradójicamente es un país desahuciado por Europa, por Alemania, por la señora Merkel, que ha dicho que no sabe quién es Pericles”, dijo el cantautor y empezó a cantar siempre ayudado por el público que no se movió, pese a la hora y la espera que tenía que soportar por los cambios en el escenario que requería cada artista.

Aute se presentó a la 10:00. Cada artista tuvo alrededor de media hora para su actuación. Enseguida salió al escenario el argentino Víctor Heredia, quien no resistió las ganas de cantar con León Gieco y lo citó para a dos voces entonar “La colina de la vida”. Luego, ya solo en el escenario, Heredia cerró su participación con “Sobreviviendo”.  

Eva Ayllón, con su folclor peruano y la melodía “Huye de mí”, se ganó también aplausos. El cierre estuvo a cargo del dueto español Víctor Manuel y Ana Belén, que le pusieron la nota movida y relajada al concierto.