Publicidad

Ecuador, 16 de Noviembre de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Comparte

Es la primera periodista que gana uno de los premios más importantes de las letras

Alexievich trabaja su literatura desde las catástrofes personales

Alexievich, de 67 años, estudió periodismo en la Universidad de Minsk. Su padre fue parte del Ejército soviético. Foto: businesstimes.com.sg
Alexievich, de 67 años, estudió periodismo en la Universidad de Minsk. Su padre fue parte del Ejército soviético. Foto: businesstimes.com.sg
09 de octubre de 2015 - 00:00 - Redacción Cultura

‘Las voces de Chernóbil crónica del futuro’, es uno de los pocos libros traducidos a la lengua castellana de Svetlana Alexievich, la escritora y periodista que este año fue condecorada con el Premio Nobel de Literatura. Su obra combina el trabajo periodístico y la afinación de la palabra a través de la literatura.

Su trabajo está atado a la voz de los invisibilizados, de los sobrevivientes tras la explosión de 1986 en Chernóbil, una ciudad de la actual Ucrania.

La autora criada en Bielorrusia, pero que nació en Ucrania en 1948, apunta a un trabajo prolongado, a la recopilación minuciosa del testimonio de cientos de personas que tenían prohibido hablar tras la serie de explosiones ocurridas el 26 de abril de 1986, cuando se destruye el reactor y uno de los edificios de la Central Eléctrica Atómica (CEA) de Chernóbil. La catástrofe de Chernóbil se convirtió en el desastre tecnológico más grave del siglo XX.

Su obra le costó el exilio temporal en París, en un departamento de la red del Parlamento Internacional de Escritores. En su país había sido acusada por los críticos de trabajar en una “pieza calumniosa producto de la fantasía” y parte del coro histérico de ataques malignos, de “retratar a la Unión Soviética de una manera poco heroica”.

Eleonora Goldma, de la asociación Russia Beyond the Headlines, describe a Alexievich como una escritora infatigable. “Pasó durante 35 años explorando la identidad de la ex Unión Soviética, para ello usó el terreno de la vida interior, lo hizo con voces reales, explorando el lado psicológico de quienes vivieron la tragedia”.

A pesar de la persecución y las acusaciones, la periodista tenía claro su terreno de acción. No en vano la Academia Sueca que le ha otorgado una de las denominaciones más importantes del medio literario reconoce su obra como un monumento al sufrimiento y a la valentía.

El trabajo literario y periodístico de Alexievich está influenciado por la metodología del collage, una especie de montaje documental en la que la voz del autor no se hace evidente. “Por medio de su extraordinario método, Alexievich profundiza nuestra comprensión de toda una era”, escribió la Academia Sueca tras el anuncio de su nombre como la galardonada.

Su trabajo tiene la influencia del escritor también ruso Alés Adamóvich. A diferencia de Adamóvich, quien recopilaba los testimonios a través de documentos, Alexievich busca sus testimonios a través de la entrevista.

“Necesito atrapar a una persona en un momento en el que ha sido sacudida”, había explicado la escritora al semanario ruso Ogonyok. Jaume Bonfill, uno de los editores de la autora, explica que su trabajo consiste en “organizar las voces como si fuera el coro de una tragedia griega, pero consigue un efecto muy íntimo”.

Para la autora, lo ordinario de la vida cotidiana es una sorpresa sucesiva. “Hay un sinfín de verdades humanas... La historia solo está interesada en los hechos; las emociones están excluidas de su ámbito de interés. Se consideran inadecuados para admitirlos en la historia. Yo miro el mundo como un escritor, no estrictamente como un historiador. Estoy fascinada por la gente”, escribió en la introducción de ‘El tiempo de segunda mano’, publicada en 2014.

Alexievich nació en Ivano-Frankivsk, el territorio de lo que hoy conforma el occidente de Ucrania. Estudió periodismo en la Universidad de Minsk y se radicó en Bielorrusia luego de que su padre se retirara del Ejército soviético.

Quizás su libro más aclamado es ‘La guerra no tiene rostro de mujer’ (1988), basado en entrevistas a cientos de mujeres que participaron en la Segunda Guerra Mundial.

Este título será traducido pronto al español, quizás con premura luego de anunciarse que ganó el Nobel de Literatura.

En este, la autora cuenta la historia de cientos de mujeres que estaban al frente de la Segunda Guerra Mundial.

Sara Danius, secretaria permanente de la Academia Sueca, explicó sobre ‘La guerra no tiene rostro de mujer’ que involucra a “casi un millón de mujeres soviéticas que participaron en la guerra y es una historia desconocida, en gran parte. Cuando se publicó en la Unión Soviética fue un gran éxito y logró vender más de 2 millones de copias. Es un documento conmovedor y al mismo tiempo es capaz de aproximar a historias individuales”.

El libro es el primero de una serie denominada, ‘Voces de la utopía’, que representa la vida en la Unión Soviética desde el punto de vista de los ciudadanos comunes. Algunos de sus libros fueron llevados a los escenarios teatrales en Francia y Alemania, donde recibió el prestigioso premio de la Paz en la Feria del Libro de Fráncfort, en 2013.

Svetlana Alexievich sucede al novelista francés Patrick Modiano, ganador del Premio Nobel de Literatura en 2014, y recibirá una recompensa de 8 millones de coronas suecas, lo que equivale a $ 973.000. El Nobel a las letras se entrega desde 1901. (I)

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

Pública FM

Noticias relacionadas

Social media