Publicidad

Ecuador, 05 de Octubre de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Comparte

“Ahora Latinoamérica se identifica por la cultura”

“Ahora Latinoamérica se identifica  por la cultura”
05 de diciembre de 2013 - 00:00

Eric Nepomuceno es un escritor y periodista brasileño, autor de Memorias de un septiembre en la plaza (1979), Cosas del mundo (1994), entre otros textos; ha traducido cerca de 70 libros, en los que constan autores notorios como Gabriel García Márquez, Eduardo Galeano o Julio Cortázar. Desde que salió exiliado de Brasil en 1965 ha recorrido América de forma incansable. Ecuador era el último país que le quedaba por pisar en el continente.

De buen trato y sonrisa constante, Nepomuceno estuvo el martes pasado en Quito presentando la revista literaria ‘viceversa’ en Mr. Books del Mall El Jardín. Junto con él, participaron los escritores ecuatorianos Javier Vásconez, Solange Rodríguez Pappe y Adolfo Macías Huerta.

Antes de empezar su intervención, Nepomuceno sacó del bolsillo su pasaporte y dijo: “Este documento se supone que me debe identificar, pero con perdón a los embajadores aquí presentes, este papel no me dice quién soy. Me identifico como brasileño y latinoamericano por las artes y la cultura”.

Y es justamente esta condición de nómada que lo llevó a trabajar en este proyecto literario, que es una colaboración bilingüe entre escritores brasileños y ecuatorianos, y que busca resolver la desconexión que ha existido en el terreno literario de ambos países. “La revista es una iniciativa osada e importante, porque yo, que circulo por América hace más de 40 años, voy a confesar una cosa: conozco poquísimo de la literatura ecuatoriana. Esto me parece una vergüenza”, dijo Nepomuceno.

   La primera edición de la revista, con una tirada de mil ejemplares, nace del trabajo conjunto del Instituto Brasileiro-Equatoriano de Cultura (IBEC) y la embajada de Brasil, en particular de la iniciativa individual de su joven adjunta cultural, Catarina da Mota Brandão.

Al llegar a Ecuador, hace unos años, ella observó la ausencia de literatura brasileña, tanto en las librerías como en la conversación de los escritores nacionales que la rodeaban, por lo que proyectó la revista con un objetivo muy simple: promover el diálogo entre dos países vecinos  que no se conocen lo suficiente en las letras.

“Brasil es una isla, una isla enorme en medio de Suramérica que solo habla portugués”, dice Catarina da Mota Brandão, lo que lo ha llevado aislarse de sus países vecinos en términos culturales para mirar solo a Europa y EE.UU. como referentes. Sin embargo, luego de conversar con escritores de ambas nacionalidades, llegó a la conclusión de que el problema era la ausencia de un canal de comunicación efectivo. Por eso, “‘viceversa’ es una primera toma de contacto que busca despertar la curiosidad de lado y lado, además de traducir autores ecuatorianos al portugués y abrir la literatura en esta lengua al mundo”, dijo.

Bajo ese objetivo, que es principalmente didáctico y pragmático, los criterios estéticos de selección de autores quedaron en un segundo plano: se escogió al género cuentístico por su brevedad y a los escritores por su representatividad. Eric Nepomuceno, encargado de editar la parte brasileña de la revista, sostuvo que el resultado es un “mosaico de la literatura hecha en mi país”, en los que constan: Antônio Torres (1940), un escritor de Bahía, en el nordeste de Brasil; Milton Hatoum (1952) de Manaos, en la Amazonía, aunque se lo puede considerar como un ciudadano del mundo; Sérgio Sant’Anna (1941), escritor urbano y experimental; Luiz Ruffato (1961), quien describe el crudo mundo obrero del que proviene; mientras que Mário Araújo (1963) es el escritor más joven, que representa a la nueva generación.

En la revista, Nepomuceno presenta una pieza breve titulada Bangladesh, tal vez, dedicada a su buen amigo, el escritor ambateño, Jorge Enrique Adoum. “Yo conocí a Adoum en el año 78, mientras estaba exiliado y viviendo en Madrid. Ambos teníamos un gran amigo en común, Eduardo Galeano, que me hablaba de él con tanto cariño y admiración que cuando nos encontramos fue una mera formalidad porque ya nos conocíamos. Fuimos hermanos toda la vida”. El cuento nace de una historia que Adoum le contó en uno de esos encuentros alrededor del mundo, pero que nunca llegó a escribir. En un punto Nepomuceno le dijo cariñosamente: “Turco, tienes dos años, si no lo escribes, lo hago yo. Está dedicado a él porque le robé la historia”.

A su vez, el debate central de la velada fue la identidad latinoamericana en sus diversas expresiones culturales, cuyo hermanamiento había reunido allí a todos los presentes. En su intervención, Nepomuceno reflexionó sobre la realidad y evolución de la relación entre culturas que deberían ser cercanas: “Por un largo tiempo los pueblos latinoamericanos nos identificamos tristemente por las dictaduras. Ahora lo hacemos por procesos que buscan rescatar algo que nunca nos dejaron tener. No bien lo que perdimos, sino algo que nunca tuvimos”. Y señaló que iniciativas tan importantes y novedosas como ‘viceversa’, demuestran que “en Latinoamérica estamos viviendo un proceso de acercamiento cultural, luego de tantos años de modelos impuestos para que no nos miremos. Me parece bien que la literatura y las artes entren en ese esfuerzo”.

Solange Rodríguez Pappe, la autora más joven y la única mujer participante, reflexionó sobre la semejanza en la desconexión que existe entre Brasil y Ecuador, y la que se vive dentro del propio país. “Yo vivo en Quito hace un año y medio, y me sigo asombrando como los escritores de aquí tienen tanto prejuicio y reticencia hacia la producción de Guayaquil. Y a la inversa”. En el fondo, según ella, el problema se resume en un hermetismo exagerado de autores y revistas, lo que causa una falta de canales de comunicación y difusión literaria. “La literatura y el arte como tal se manejan como una mafia -como dijo de forma cariñosa Eric-. Mis amigos y yo ponemos una revista y colaboramos mis amigos y yo, pero invitar y abrirse es complicado. Nunca se nos ocurre que los círculos pueden y deben abrirse. Es triste porque entre unos y otros siempre nos estamos poniendo el pie para tropezarnos”.

Para ella, una iniciativa como la revista ‘viceversa’ es ideal, ya que funciona como un “punto neutral” que no está siendo impulsado por un escritor o su círculo, sino por una institución con unos fines concretos, que no son necesariamente estéticos o de autopromoción. “No es solamente la voz de uno eligiendo según sus criterios, sino que se busca una apertura de forma deliberada”, dijo.

Por su parte, y para cerrar el acto, el escritor guayaquileño Adolfo Macías recordó a Jorge Luis Borges, quien dijo una vez que su verdadera patria estaba en los libros: estos deberían ser siempre el espejo donde mirarnos para buscar nuestra identidad individual y colectiva.

DATOS

En la revista participan seis escritores ecuatorianos: Adolfo Macías Huerta, Eliécer Cárdenas, Javier Vásconez, Leonardo Valencia, Vladimiro Rivas y Solange Rodríguez Pappe.

Además, están seis contrapartes brasileños: Antonio Torres, Luis Ruffato, Mário Araújo, Milton Hatoum, Sergio Sant’Anna y la colaboración especial del escritor y traductor Eric Nepomuceno.

Se imprimieron 1.000 revistas que serán distribuidas de forma gratuita entre escritores de ambos países, en la librería Mr. Books, en universidades y bibliotecas de Ecuador y Brasil.

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

Pública FM

Noticias relacionadas

Social media