Después de un proceso judicial que prescribió y mediante gestión entre ambos países, Argentina devolvió a Ecuador 439 piezas arqueológicas de las culturas Valdivia, Chorrera, Tuncahuán e Inca, algunas de las cuales datan del año 1600 antes de Cristo. Se tratan de morteros, vasijas, esculturas de piedra y arcilla, figuras eróticas, tejidos (gasas y telas bordadas), cuchillos y otros objetos antiguos de carácter ceremonial, la mayoría se ha conservado en completo estado.

Las piezas, cuidadosamente embaladas, partieron este viernes al mediodía en un vuelo de KLM desde el aeropuerto internacional de Ezeiza, en las afueras de Buenos Aires, cumpliendo una promesa hecha en agosto pasado por la entonces presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, pocos meses antes de concluir su mandato.

Las piezas recuperadas del patrimonio cultural ecuatoriano habían ingresado al país austral de contrabando y estaban circulando en el mercado ilegal de bienes culturales.

“La embajada de Ecuador en Buenos Aires trabajó muy arduo” con las autoridades argentinas para lograr esta restitución, dijeron a este diario fuentes de la delegación diplomática.

A fines de este mes partirá otro contingente similar -con 4.150 piezas- pero hacia Perú. Entre estas piezas figura una momia.

“Es un hecho inédito dar sin que te pidan. Esto es algo que ha sucedido sin reclamos internacionales, sin litigio”, expresó el secretario de Patrimonio Cultural de la Nación, Américo Castilla. El funcionario ratificó así una política de Estado decidida por el anterior gobierno kirchnerista. En agosto, cuando realizó el anuncio, la exmandataria afirmó que “estamos haciendo algo totalmente inusual, yo diría casi inédito, no solamente en América Latina, seguramente que sí, sino en el mundo”.

Castilla dijo que “son piezas de un valor fenomenal y no solo de valor económico. Las piezas de la cultura Valdivia de Ecuador son consideradas las más antiguas de Latinoamérica”, subrayó.

Diana Rolandi, directora del Instituto Nacional de Antropología y Pensamiento Latinoamericano (Inapl), indicó que también es inédita “la cantidad de obras y la calidad de las mismas”. En ese organismo fueron conservadas las piezas durante una década y media.

“Ustedes saben que el robo de piezas de arte y su comercio internacional se ha convertido en un delito típicamente transnacional. Y, precisamente, después de una rigurosa investigación, con intervención obviamente del Poder Judicial, es que se produce esta restitución de piezas”, indicó.

La causa por el contrabando de piezas arqueológicas de Ecuador y Perú, y que incluyó allanamientos en seis distintos puntos de de Buenos Aires, se extendió entre 2000 y 2007. La justicia entonces decidió que el patrimonio incautado debía conservarse en la sede del Inapl hasta que fuera devuelto a sus dueños. El instituto debió entonces acondicionar depósitos del edificio en el que funciona y en el Museo del Hombre de la capital argentina.

Los responsables del contrabando de estas piezas son cuatro argentinos identificados. Pero el proceso judicial demoró tanto en definirse, con el paso de la causa por varios juzgados, que finalmente prescribió.

Rolandi manifestó que las piezas serán restauradas en Ecuador y conservadas en el Instituto Nacional de Patrimonio Cultural. “Sabíamos que teníamos bajo nuestra responsabilidad una colección excepcional y representativa de Ecuador, pusimos mucho esfuerzo en su cuidado”, indicó la arqueóloga.

Y agregó: “el saqueo de sitios arqueológicos destruye la historia y no le permite al investigador explicar una cultura, porque cuando se busca una pieza se destruye todo el entorno, es el contexto lo que a nosotros como investigadores nos permite reconstruir el pasado. Las piezas por sí solas son maravillosas estéticamente, pero no dicen nada sobre el pasado”. (I)

Datos

Cristina Kirchner, expresidenta argentina, anunció en agosto del año pasado la restitución de las más de 4.000 piezas arqueológicas que serían devueltas a Ecuador y Perú.

Estos objetos forman parte de un total de entre 15.000 y 20.000 restos arqueológicos, paleontológicos y paleobotánicos provenientes de América, Europa y Asia recuperados, entre los que hay piezas de cerámica que datan del año 3500 antes de Cristo.

Las piezas ingresaron ilegalmente al país y fueron recuperadas por la Policía Aeronáutica en el año 2000. Desde entonces, con no pocas intervenciones judiciales, pasaron a ser custodiadas y cuidadas por el Inapl.