Los aportes teóricos de Ubaldo Gil dejan su huella en Manabí
Los pasos del escritor Ubaldo Gil dejaron huellas en su provincia natal: Manabí, donde montó la editorial Mar Abierto, una de las más activas en el país.
La vida de Gil llegó a su fin el 28 de diciembre, a las 18:30, cuando ya caía la noche en Guayaquil, adonde el escritor, editor, catedrático y crítico de teatro fue trasladado luego de que sufriera tres infartos.
En la Clínica Panamericana, donde estaba internado, “esperaban que se recuperara un poco para operarlo, pero no resistió”, cuenta Raymundo Zambrano, actor y profesor de artes escénicas en Manabí, amigo de Gil.
Ubaldo Gil era profesor de la Universidad Laica Eloy Alfaro de Manabí (Uleam), en la que dictaba las cátedras de Semiótica y Filosofía en la Facultad de Comunicación.
Pero en la Uleam confluyó también con una generación de gestores culturales que convirtieron al centro de estudios superiores en el motor de la cultura de Manta.
“Siempre los aportes de Ubaldo al teatro fueron teóricos”, dice Zambrano. Ambos fueron parte de los fundadores de la agrupación teatral La Trinchera en 1982.
El nombre de La Trinchera fue idea de Gil, dice Zambrano, quien considera que su amigo dio el primer impulso al grupo en su identidad.
“Desde una población relativamente pequeña formó una editorial que tuvo proyección nacional”.
“Éramos casi militantes. En ese tiempo el grupo era una célula socialista. Justamente el director, Gonzalo Andrade, era comunista. Entonces nosotros éramos contestatarios”, comenta Zambrano.
Años después, Gil dejaría la actuación, pero no el teatro. Continuó ligado a las tablas desde el campo de la crítica, que ejerció durante años en el Festival Internacional de Teatro de Manta, organizado por La Trinchera.
La inserción en la crítica y la teorización fue perfeccionada por Gil en España, donde obtuvo una maestría y profundizó en el estudio de la Semiótica y la Filología.
“Era el único crítico teatral que había en Manta y Manabí”, lamenta Zambrano.
Zambrano y Gil fueron también compañeros en un taller que el escritor guayaquileño Miguel Donoso Pareja dictó en la Uleam cerca de 5 años, entre 1988 y 1992. Dentro del grupo se encontraba, además, el reconocido poeta Pedro Gil, hermano de Ubaldo.
Donoso, para quien la muerte de Ubaldo Gil ha significado “una pérdida importante y dolorosa”, suele nombrar en sus columnas quincenales en EL TELÉGRAFO las publicaciones que realiza la editorial Mar Abierto, dirigida por Gil hasta sus últimos días.
“Ubaldo fue un alumno aprovechado, inteligente y sensible”, manifiesta Donoso, que cataloga a Gil como “un excelente animador de la lectura”.
A decir del escritor guayaquileño, el papel de Gil como editor superó en trascendencia a sus incursiones en la literatura.
“Como escritor siempre estuvo tras bastidores. Siempre estuvo más bien dedicado a promover”, indica Donoso, que destaca el trabajo incansable de Gil.
A ese trabajo, Donoso lo considera “muy importante, tanto que a partir de una población relativamente pequeña formó una editorial que tuvo proyección nacional”.
Pero el autor de La muerte de Tyrone Power en el monumental de Barcelonadestaca también el “criterio justo” de Gil a la hora de escoger y editar los libros que se publicarían con el sello de Mar Abierto.
Según Donoso, la labor de Gil fue una de las claves a través de las cuales se pudo “proyectar un movimiento cultural de suma importancia en Manta”.
Como escritor son de su autoría, entre otros, los libros Trama sin utopía (1993), La noche en que fui Cristóbal Colón (2005) y su más reciente publicación: Amor más allá de Madrid, presentado en 2013.
Gracias a su labor en la editorial Mar Abierto, Gil fue designado vicepresidente de la Asociación de Editoriales Universitarias de Latinoamérica y del Caribe (Eulac).
Gil tenía 49 años cuando se produjo su muerte, una muerte prematura para una persona que tenía más que dar a su gente.
Sepultado el pasado martes 31 de diciembre en el camposanto Jardines del Edén (Manta), Gil será recordado por sus estudiantes y sus colegas -artistas y profesores- como uno de los impulsores de las actividades artísticas y culturales en Manta, lideradas por la Uleam.