Trident wolf eclipse, nueva ráfaga de Watain
Por Leo ‘La Cabra’ Zaldumbide
En lo que va del año han aparecido placas de rock y metal para todos los gustos. Introspectivos y lúgubres, With doom we come, de los austríacos Summoning; Höllenzwang-Chronicles of perdition de sus vecinos Abigor o X-Varg Utan Flock, de Shinning (Suecia), no dejarán indiferentes a quienes persigan las más siniestras atmósferas blackeras.
Vale la pena hacer una mención al regreso de los veteranos británicos Trespass, quienes con su Footprints in the rock demuestran que el metal de toda la vida sigue estando vigente.
Para cuando se cierre esta edición habrá que escuchar nuevas producciones de Machine Head, Loudness, Orphaned Land, Phil Anselmo, The Poodles, Rebellion, entre muchos otros. Toda selección es subjetiva, claro, pero yo recomiendo este disco:
‘Trident Wolf Eclipse’ (Watain)
Con casi 20 años de trayectoria, Watain es uno de los más grandes referentes del black metal sueco y mundial. E (Erik Danielsson, bajo y voces), H (Håkan Jonsson, batería) y P (Pelle Martin Forsberg, guitarra) no han dejado de sorprender con placas tan controvertidas como ‘Casus Luciferi’, ‘Rabid death’s curse’ o el famoso ‘Lawless darkness’ (Grammy sueco a la Mejor Interpretación rock 2011).
Grabado en los estudios Necromorbus de Suecia, ‘Trident...’ tuvo una producción entre pulida y cruda que permite apreciar sus múltiples matices compositivos. La banda se apoya, desde 2003, en algunos músicos de sesión como Álvaro Lillo (Excerator) o Set Teitan (Aborym); y, en este último disco, destaca la participación de Attila Csihar (Mayhem, Aborym) en el poderoso tema ‘Ultra’.
Disco del mes
Watain intenta volver a las raíces que dieron forma al sonido crudo y brutal que les caracteriza, con omnipresentes temáticas oscuras y blasfemas. Canciones como ‘Furor diabolicus’ o ‘Antikrists Michael’ dan cuenta de la compleja mixtura emocional (temática y musical) que supone entender esta propuesta.
‘Towards the sanctuary’ es una envolvente ráfaga de poder que se sustenta en la eficacia de la batería de H y en la contundencia de las guitarras de P. El resultado, más que una pieza musical, es toda una atmósfera sonora.
Referencias más primitivas se hallan en la oscura ‘Sacred damnation’ y más thrashers en la mundana ‘Nuclear alchemy’. El tema en que se encuentra más complejidad y solvencia es ‘Teulfelsreich’ junto a ‘Ultra’. La banda ha buscado generar una obra compleja que incluye el trabajo gráfico de Timo Ketola, habitual diseñador de su parafernalia visual. (O)