El cantante y bajista de la banda alemana Destruction, Marcel “Schmier” Schirmer, ha dicho que consideraba una estafa montar un concierto para público que vea el espectáculo desde su auto.

Fue Metal Voice el medio que recogió su parecer, luego de que circulara un vídeo en que Doro, también en Alemania, baja del escenario –micrófono en mano– para animar a los conductores que la miran respetando el distanciamiento social recomendado para evitar contagios.

El 4 de julio es la fecha en que Destruction volverá a un escenario, en Suiza. Sobre eso, Schmier ha dicho que solo habrá un 40% del aforo, por medidas de precaución que ha definido el gobierno suizo. Pero no, no tocaría frente a autos porque “no funciona para el metal, la gente tiene que moverse y sentir el bajo”.

Solo lo ve como una última opción; que remplazaría por el sistema de audio de cualquier auto. “Entiendo que la gente haga estas cosas ahora por desesperación, pero no es algo hecho para Destruction. Nos hicieron una oferta así, pero no estafaríamos a nuestros fans con esa mierda”.

El promotor del británico Download Festival, Andy Copping, en cambio, ha llegado a decir que “los conciertos con distancia social, sabemos, son imposibles”, según recoge la revista Kerrang!. El promotor ha basado su reacción en la cercanía, comunidad necesaria para este tipo de eventos, aunque ya está trabajando en que los asistentes puedan estar en sus autos.

Robb Flynn, de Machine Head, por su parte se ha opuesto a que los rockeros vean un show tras un volante, diciendo que se trata de la “cosa más estúpida” que puede verse. Y la opción que da “para que el heavy metal sobreviva” es escuchar música en streaming.

También se lo dijo a Kerrang!, luego de sorprenderse con que en Europa las señales de aprobación puedan ser ruidos de claxon en algunos shows. Para el músico estadounidense eso no puede sustituir a 5.000 personas gritando, aplastándose contra la valla, amontonándose y sudando. “Esa liberación catártica de energía por la que esperaré”, concluyó. (I)