Una cámara de representantes no siempre representa cabalmente el sentir popular. Pero las instituciones de representación sirven para ser eficientes al Estado, ya que el pueblo no va a tomar decisiones de cada acontecer. En el caso ecuatoriano, existe una mayoría parlamentaria del partido de gobierno. Sin embargo, esta alternativa puede ser impopular.

Creo que es una falencia no contemplar una opción en el caso de que el pueblo quiera permitir por excepción la reelección por periodos extraordinarios.

Una segunda alternativa es realizar una consulta popular. Pero si no se contemplan otros cambios a la Constitución, lo considero innecesario. Es cierto que puede servir a grupos minoritarios como precedente para solicitar consultas populares para cada tema en el que no estén de acuerdo, y hay que evitarlo. Como tercera alternativa, pero relacionada con la primera, pienso que se debería analizar tener un sistema electoral en el que se plasme de mejor manera el sentir del pueblo. Para ello, admitir los votos aditivos y sustractivos. Permitiendo, con una de las opciones, por mayoría de nulos, provocar una nueva elección con nuevas alternativas y autorizar la reelección extraordinaria, por ejemplo. A mi juicio, como cuarta alternativa, creo que el Presidente no tiene impedimento para ser candidato a vicepresidente; además, con su actuar daría ejemplo de sus palabras sobre que hay que estar donde la Revolución Ciudadana lo necesite.

Juan Pablo Romero Aguirre