La opinión, como derecho de quienes vivimos en democracia, fomenta el debate y, en su máxima expresión, contribuye al desarrollo de las sociedades. Entonces, para el lector, resultan indignantes ciertas opiniones de quien ha disfrazado su posición política bajo la máscara del periodismo, transgrediendo con su vanidad el respeto que tanto pregona, es así que, en el artículo de opinión: ‘Chávez se fue a tiempo’ (El Comercio, 21/05/2014), la periodista dice: “Es cierto que Nicolás Maduro ha brillado por su ignorancia y su ineptitud”, lo cual es una muestra de ofensa e irrespeto a quien fue elegido (estemos de acuerdo o no) por el soberano pueblo venezolano. Pero no se detiene ahí, en el desarrollo del artículo la periodista menciona: “Maduro no hará nada mientras la mitad del país siga aplaudiéndolo, una mitad indolente… porque mensualmente le llega un dinerito al bolsillo que los tiene contentos”, afirmación que, sin lugar a dudas, es una pedrada a la dignidad de un pueblo que con una mayoría democrática, ha elegido su opción política.
Además, da la impresión de que sus opiniones tratarían de justificar la violencia, es así que, en el artículo ‘Carta a Edwin Jarrín’ (El Comercio, 28/05/2014), la periodista se cuestiona lo siguiente: “Romper un vidrio y entrar a un canal de TV supuestamente público… durante los hechos del 30 de septiembre ¿es acto de terrorismo y sabotaje que merece cuatro años de prisión?”, con lo cual parecería normal justificar cualquier acto vandálico contra un ente público tan solo por no estar de acuerdo con el Gobierno.
Como lector alzo mi voz de protesta para quienes (aunque lo nieguen) tienen espacios masivos donde infunden este tipo de aseveraciones que no aportan en nada al debate de altura que necesita el país. Bajo este marco de ‘respeto’ y como un simple lector me planteo lo siguiente: si la periodista cuestiona las condecoraciones a ‘Guerrilleros héroes’, (El Comercio, 14/05/2014), ¿tendría yo también el derecho justificado de cuestionar los premios internacionales que reciben aquellos ‘periodistas’ que usan la ‘libertad de expresión’ como bandera de su lucha política? Queda abierto el debate.
Lenin Aucatoma Jr.
