Portoviejo, Manabí.-

“Ahora estoy mejor y quiero cantarle a la vida (sonríe); me siento bien al estar otra vez con mi familia. Los doctores me salvaron”, son las palabras de Gustavo Toro, de 42 años, quien hasta hace 2 años deambulaba por las calles de Portoviejo. Estaba perdido en sus confusos recuerdos y pensamientos, vestía con ropa sucia, llevaba cabello largo, barba desigual, descalzo, con el torso desnudo, golpeado, rodeado de basura y peligros.

Estela Toro, hermana de Gustavo, recuerda que la crisis psiquiátrica de Gustavo se agravó en 1998. “Fue cuando nuestra madre falleció; esto provocó un gran dolor en él y desde aquel entonces iba todos los días al cementerio. Con el tiempo sus visitas al camposanto se volvieron constantes, llegando al punto que permanecía todo el día allí, dejó de comer y empezó a descuidar su imagen”.

La condición de Gustavo empeoraba con el pasar de los años. Por mucho tiempo se alimentaba solamente de basura y dormía en la calle. “Esta situación se nos fue de las manos, no podíamos controlar a nuestro hermano”, agregó Estela.

En su punto máximo de desesperación, la familia de Gustavo empezó a buscar ayuda. Fue así que, luego de varios desaciertos, llegaron hasta el hospital Verdi Cevallos Balda, en Portoviejo.

DATOS

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), aproximadamente el 20% de los niños y adolescentes del mundo tiene trastornos o problemas mentales.

Datos de la OMS indican que cerca de la mitad de los trastornos mentales se manifiesta antes de los 14 años. Los problemas neuropsiquiátricos figuran entre las principales causas de discapacidad.

El Atlas mental 2014 de la OMS asegura que existe un déficit de los especialistas dedicados a sanar los trastornos y problemas mentales en el mundo: apenas el 1% está especializado en estas ramas.

Además, la organización alerta que los países con medianos y bajos ingresos destinan solo $ 2 per cápita a los hospitales mentales y tratamientos psiquiátricos. Se conoce que 1 de cada 10 personas sufre de problemas mentales. Solo 99 países tienen una ley específica para tratar enfermedades relacionadas con la psiquis.Arjenys Mendoza fue uno de los psiquiatras de Gustavo, él destacó que la familia es parte fundamental en la rehabilitación de este tipo de pacientes. “En el Verdi Cevallos dimos seguimiento a su caso y el paciente fue sometido a un tratamiento. Actualmente viene a consulta cada dos o tres meses y le damos la medicación correspondiente y acompañamiento psicoterapéutico. Es importante señalar que el tratamiento ha dado muy buenos resultados; la familia se ha involucrado mucho para que Gustavo salga adelante y esto es importante.

Con su apoyo se garantiza que él tome sus medicamentos, reciba afecto, cuente con una alimentación adecuada, vestimenta y buen trato con los demás. Gracias a este trabajo en conjunto se puede realizar una readaptación a la sociedad”, aseguró Mendoza.

El profesional agregó que Gustavo ingiere vitaminas y medicamentos para controlar la esquizofrenia. Y todo es gratuito. “Para mantenerse estable, cada noche toma una pastilla para dormir, pues si su cerebro no descansa las 8 horas necesarias se puede complicar su situación”, explicó Mendoza.

Para abordar de una forma apropiada el trastorno mental crónico de Gustavo, ingresó a tratamiento integral (médico y psicológico) por parte del personal del Ministerio de Salud Pública (MSP).

Compensado el cuadro clínico y los trastornos de conducta, Gustavo fue reinsertado al entorno familiar fortaleciendo sus procesos de autonomía. Hoy vive con sus hermanas y sobrinos en la ciudadela Briones, de Portoviejo.

“Se nota claramente la tremenda recuperación que tuvo este muchacho, parece otra persona. Es increíble cómo se puede recuperar una persona que parecía completamente perdida en el tiempo y espacio; esto es gracias a un adecuado tratamiento y, principalmente, al apoyo familiar”, manifestó un habitante del barrio donde vive Gustavo.

De la época triste de Gustavo solo quedan unas cuantas fotos. Ahora, en compañía de su familia, su vida es mejor y continúa con su tratamiento médico y psicológico. “Cada 2 meses acompañamos a nuestro hermano a realizarse los chequeos médicos al hospital. Estamos muy contentos por el gran cambio en nuestras vidas”, comentó con alegría Narcisa, hermana de Gustavo.

Es importante resaltar que, dentro del plan de fortalecimiento y acceso a los servicios integrales de salud mental del MSP, a escala nacional existen 111 unidades de salud de primer nivel con atención ambulatoria en alcohol y otras drogas, además de salud mental.

25 unidades brindan servicios para la atención a personas con trastornos mentales graves, así como consumo problemático de alcohol y otras drogas en la modalidad ambulatoria intensiva. Mientras que 3 centros especializados en tratamiento ayudan a pacientes con dificultades problemáticas de alcohol y estupefacientes.

En total, de enero a julio de 2015, 3.099 profesionales de la salud han sido capacitados en la modalidad presencial en salud mental y consumo problemático de alcohol y otras drogas.

Otros 13.924 han recibido talleres virtuales sobre atención y planes estratégicos de salud mental y trastornos graves.

Por otro lado, dentro de la construcción de Guías de Práctica Clínica y de Atención, al momento se encuentran en validación las Normas de Ansiedad y Esquizofrenia; también se elabora la Guía de Depresión.

Para el tema de prevención y promoción de trastornos está en desarrollo y validación la Guía de Salud Mental Comunitaria. (I)