¨La democracia es el peor sistema de gobierno diseñado por el hombre. Con excepción de todos los demás.”
Deduzco que sir Winston Churchill, político inglés y premio Nobel de literatura, al expresar su concepto de democracia quiso decir que es mejor vivir en una sociedad en donde los ciudadanos puedan elegir a su gobernante y cambiarlo cada cierto tiempo, antes que vivir eternamente sometidos a un déspota.
Para evitar la concentración de poder, la creatividad humana diseño la democracia como un sistema de pesos y contrapesos, mediante el cual las funciones del estado se controlan entre si. La división de funciones es una característica esencial de la forma republicana de gobierno, en que el poder político se distribuye entre las funciones legislativa, ejecutiva y judicial, de manera que a cada una le corresponde ejercer un conjunto limitado de facultades de mando y realizar una parte determinada de la actividad gubernamental.
En el Ecuador la Función Legislativa se ejerce por la Asamblea Nacional, está integrada por 137 asambleístas elegidos por votación popular que representan a las provincias del Ecuador, además de legislar, tiene el rol fundamental de ejercer el control político, es decir fiscalizar a la Función Ejecutiva para evitar el abuso del poder o juzgar políticamente el accionar de los otros órganos del Estado.
Una cosa es el deber ser, otra, lo que realmente es.
Se evidencia fastidio y decepción de la gente con respecto al desempeño de los asambleístas, se dice que están ausentes de las urgencias, que se desentienden de la crisis y se cuestiona su papel en la vida pública.
Aprovechando el desprestigio de la Asamblea Nacional, surgen voces irresponsables que proponen su desaparición, no comprenden el papel único que tiene el equilibrio de poderes en la democracia.
Es justo que el pueblo exija a sus mandatarios asuman sus obligaciones, más en estos momentos difíciles. Pero en el futuro, los ciudadanos con su voto, deben elegir mejor a sus representantes. (O)