Este martes, la Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció que las muertes diarias por covid-19 en Europa aumentaron cerca de un 40% en comparación con la semana anterior. Francia, España, Reino Unido, los Países Bajos y Rusia son los países más afectados. Las unidades de cuidados intensivos de los hospitales nuevamente han comenzado a llenarse de pacientes en delicado estado de salud.
Al 25 de octubre, se registraron más de 45 millones de casos y 1,1 millones de muertes en el mundo, con más de 2,8 millones de casos nuevos y cerca de 40.000 nuevas muertes durante la semana pasada, según la OMS. Por segunda semana consecutiva Europa ha registrado la mayor cantidad de nuevos contagios, aunque estos también han aumentado en regiones como Latinoamérica, el Mediterráneo oriental y África.
Estados Unidos, India, Brasil y Rusia son los países que registran el mayor número de contagios en el mundo, aunque también se ha dado un incremento de casos en Italia durante la última semana (más 221 muertes), en donde además ya se han registrado protestas que rechazan una nueva etapa de restricciones.
En España, ha entrado en vigor un decreto de estado de alarma, debido al acelerado aumento de casos. En Francia, el presidente Emmanuel Macron anunció un nuevo confinamiento generalizado para esta semana. En este país se reportaron 33.147 nuevos casos y 523 muertes (la mayor cifra en un día desde el pasado mes de abril).
Los hospitales en Bélgica han pedido a sus médicos contagiados que no presentan síntomas, que continúen trabajando, para evitar que el sistema de salud colapse.
En lo que respecta a América Latina, a pesar del tiempo que tuvo para prepararse y enfrentar la pandemia, sus condiciones económicas, de vivienda y salubridad, permitieron que el continente sea el lugar propicio para la propagación del covid-19.
Estadísticas demuestran que, durante los primeros meses de combate a la pandemia, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador y Perú fueron los países con más muertes del continente. La alta informalidad laboral, hacinamiento y densidad poblacional, la baja infraestructura hospitalaria; fueron algunas de las causas que hicieron que la propagación del virus se acelere.
De igual manera, la baja capacidad de reacción de los gobiernos y el incumplimiento por parte de la población a las medidas recomendadas, llevan a pensar en la posibilidad de un nuevo repunte de contagios en varios países de esta región en las próximas semanas.
Frente a ello, será importante contar a futuro con una comunicación y coordinación adecuada, que permita optimizar la toma de decisiones e implementar estrategias adecuadas. La ciudadanía deberá aprender a convivir con una pandemia que estará presente por un buen tiempo y que por el momento está lejos de irse.
La realidad actual demuestra que el camino para lograr una inmunización total será lento. El comportamiento que como ciudadanos desarrollemos para hacer frente escenarios futuros será vital.