Fruto de nuestras investigaciones académicas permanentes, proponemos un modelo de gestión de prioridades que contribuyen de forma directa a la competitividad y sostenibilidad de las empresas, públicas o privadas, cimentándose en valores, éticos, morales cristianos, incorporando a los “Colaboradores o Talento Humano”, que aportan en todas las aéreas como recursos que marcan diferencias en las empresas para ser más competitivas, mediante la Investigación & Desarrollo (I&D) y la creación de Ventajas Competitivas Diferenciadoras Sostenibles (VCDS) que los clientes consumidores finales identifican, aprecian y valoran, para lograr su preferencia y lealtad.
La clave está en contar con colaboradores o trabajadores que constituyen el recurso más importante para las empresas, en las áreas de planta, oficina y dirección, para que sean Trabajadores Eficientes (TE), con Educación Continua (EC), con Experiencia Laboral remunerada y no remunerada (EL), con capacidad de desarrollar el Espíritu Emprendedor (EE), siendo Polivalentes (P) y entrenados para cumplir varios puestos y funciones, además de ser Proactivos (P), porque no solo reaccionan a los hechos, sino que se anticipan a los mismos.
Para así convertirlos en el Talento Humano (TH) y los Trabajadores del Conocimiento (TC), que debidamente formados en Valores o Virtudes Humanas, orientados en la Ética y la Moral con ascendentes Cristianos (VEMC), sean ellos los constructores de las Ventajas Competitivas Diferenciadoras Sostenibles (VCDS) a través de la Investigación & Desarrollo (I&D), que garantizan a las empresas su sostenibilidad o permanencia en el largo plazo, al contar con clientes recurrentes y más leales, que permiten lograr prosperidad social integral.
[{THVEMC}*{TE+EC+EE+EL+ P+P}+{ I&D+VCDS}] = CSE
Modelo que permite priorizar el aporte del talento humano con valores, que es el auténtico generador de la riqueza que construye prosperidad integral, porque es el único recurso que reacciona y acciona por sí mismo los demás factores de la producción; son elementos pasivos que se potencializan o desperdician, según las manos que los operan.
El reto de ser eficientes, en la sociedad, está en producir y prestar servicios y productos de calidad a precios diferenciados para el mercado, por empresas públicas y privadas, que compiten en similitud de condiciones.