Una China próspera, confiada y abierta promueve el desarrollo común del mundo
12 de marzo de 2024En el presente mes de marzo se celebraron en Beijing la segunda sesión de la XIV Asamblea Popular Nacional (APN) y del XIV Comité Nacional de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino (CCPPCh). Estas sesiones, como la agenda política anual más importante de China, han vuelto a cautivar la atención mundial, que se enfoca en los logros sobresalientes que ha demostrado una China próspera, confiada y abierta.
En primer lugar, la economía china en general se ha estado recuperando y mejorando. En 2023, el producto interno bruto (PIB) superó los 126 billones de yuanes, con un aumento del 5,2%, que se encuentra entre las más altas de las principales economías del mundo, por delante de los Estados Unidos (2,5%), la eurozona (0,5%) y Japón (1,9%). China sigue siendo un importante motor del desarrollo económico global, con una contribución prevista de más de un 30% al crecimiento mundial. El Gobierno chino logró una garantía fuerte y efectiva para sostener el bienestar de sus poblaciones, lo que se ha traducido en un ascenso anual del 6.1% de la renta per cápita disponible, además de un alza del 8.4% en los ingresos de los habitantes de áreas rurales que han salido de la pobreza.
En segundo lugar, la apertura de alto nivel de China al exterior ha sido constante. Durante el último año, China ha impulsado estabilizar la escala y optimizar la estructura del comercio exterior, donde las exportaciones de vehículos eléctricos, baterías de litio y productos fotovoltaicos experimentaron un aumento de casi el 30%. La producción y ventas de vehículos de nueva energía de China representó más del 60% del total mundial. Gracias a las mejoradas políticas para atraer inversión extranjera y la ampliada apertura institucional de China, cerca de 54.000 nuevas empresas con inversión extranjera se establecieron en el país en 2023, subiendo el 39,7% interanualmente.
En tercer lugar, ha sido fructífera la construcción conjunta de la Franja y la Ruta de alta calidad. El año pasado se celebró con éxito el tercer Foro de la Franja y la Ruta para la Cooperación Internacional, cuando el presidente Xi Jinping anunció los ocho pasos principales que China daría para apoyar dicha construcción, trazando un nuevo modelo de la Franja y la Ruta. A lo largo del último decenio, se han unido a la familia de la Franja y la Ruta más de tres cuartas partes de los países en el mundo, así como más de 30 organizaciones internacionales. Se han llevado a cabo más de 3.000 proyectos de cooperación, generando una inversión cerca de un billón de dólares, en beneficio del desarrollo y el bienestar de todo el mundo.
En cuarto lugar, la diplomacia de gran país con peculiaridades chinas se ha impulsado de manera integral. En el último año, China se ha esforzado por fomentar la construcción de la comunidad de futuro compartido de la humanidad, orientada por la implementación de la Iniciativa de Desarrollo Global, la Iniciativa de Seguridad Global y la Iniciativa de Civilización Global. Ha profundizado y extendido la red global de asociaciones, mientras desempeñando un papel activo y constructivo en la resolución de cuestiones candentes internacionales y regionales, de manera que ha contribuido significativamente a la promoción de la paz y el desarrollo mundiales.
El presidente Xi Jinping ha señalado que el desarrollo de China conlleva beneficios al mundo, y China a la vez necesita abrirse al mundo para alcanzar el desarrollo. China persigue inquebrantablemente una estrategia de apertura con beneficio mutuo y ganancia compartida. Aboga por una globalización económica universalmente beneficiosa e inclusiva y se opone a toda forma de unilateralismo y proteccionismo. Las dos sesiones de este año han transmitido el claro mensaje de que China seguirá ampliando la apertura al exterior de alto nivel: en 2024, China promoverá la construcción conjunta de la Franja y la Ruta de alta calidad hacia lo más profunda y sólida; abolirá plenamente las medidas restrictivas a la inversión extranjera en el sector manufacturero y facilitará el acceso al mercado de servicios como la telecomunicación, la salud, etc.; así mismo aumentará la comodidad hacia los extranjeros para trabajar, estudiar y viajar en China. Son importantes medidas para que el país consiga un desarrollo de alta calidad, promueva el desarrollo común del mundo y construya una comunidad de futuro compartido de la humanidad.
Tanto Ecuador como China no solo son países en desarrollo, sino también socios estratégicos integrales y participantes co-constructores de la Franja y la Ruta. Comparten las mismas aspiraciones y solidaridad en la búsqueda del desarrollo y la revitalización nacional y en la práctica del multilateralismo genuino. Con la inminente entrada en vigencia del Tratado de Libre Comercio bilateral, China y Ecuador promoverán juntos el desarrollo de la globalización económica hacia un rumbo más abierto, inclusivo, equilibrado y con ganancia compartida, en mayor beneficio a ambos pueblos y los del mundo.
China está dispuesta en aunar esfuerzos con la parte ecuatoriana para realzar los valores comunes de la humanidad, que son la paz, el desarrollo, la equidad, la justicia, la democracia y la libertad, en camino de construir una comunidad de futuro compartido entre China y Ecuador, a fin de hacer contribuciones conjuntas para que el mundo avance hacia un brillante futuro de paz, seguridad, prosperidad y progreso.