No, no es el título de un bolero. Es el título que he escogido para hablar de cómo las sociedades van cambiando respecto a sancionar el comportamiento de los varones que transgreden las normas del respeto hacia las mujeres y cómo promueven ir hacia un entorno libre de acoso que garantice no sólo mayor seguridad y bienestar para las mujeres, sino para construir un mundo más igualitario, saludable y cohesionado.
El beso no consentido del presidente de la Real Federación de Fútbol de España, Luis Rubiales, a la jugadora Jenni Hermoso levantó revuelo en los periódicos y las redes del mundo. El presidente de la RFEF agarró la cara de la futbolista con las dos manos y le dio un beso en la boca durante la entrega de medallas a las deportistas que acababan de convertirse en campeonas del mundo. El hecho sucedió en un estadio de Sydney, en Australia, y empañó el regocijo de la selección femenina española.
Una vez que la prensa internacional se hiciera eco del caso, las redes sociales se volvieron un hervidero en España y en el mundo. La ministra española de Igualdad, Irene Montero, tuiiteó de forma inmediata: “No demos por hecho que dar un beso sin consentimiento es algo “que pasa”. Es una forma de violencia sexual que sufrimos las mujeres de forma cotidiana y hasta ahora invisible, y que no podemos normalizar. Es tarea de toda la sociedad. El consentimiento en el centro. Solo sí es sí”. La Ministra se refería en su Twitt a lo absurdo que resulta que, a menos de un año de haberse aprobado la Ley de consentimiento sexual en España, se haya producido un incidente como éste.
Los videos del beso en donde se ve cómo Rubiales estampa el beso a la jugadora se pudieron ver repetidas veces en las publicaciones de Internet, pero ahora ha salido a la luz un video completo en donde se ve claramente cómo el dirigente no sólo que besa a la jugadora sino que prácticamente se sube sobre ella, se encarama realmente, abrazándola con las piernas, se balancea y luego le estampa un beso. La presencia de la reina Letizia y de la princesa Sofía –una menor de edad–, al lado de Rubiales, hacen todavía más indecoroso su comportamiento.
Para colmo de lo que puede hacer una persona que no tiene idea de lo que es tener vergüenza, se ve a Rubiales no solamente besando sin permiso a la jugadora sino que, durante el partido, se agarra los genitales en el palco para celebrar el título mundial de ellas. Los espectadores que vieron la señal de TVE transmitiendo cuando las jugadoras en el césped mostraban a la cámara su alegría con la medalla de oro colgada del cuello, pudieron ver además que el presidente se acerca por detrás de ellas y aprovecha para besar a Olga Carmona, otra de las jugadoras. Esta vez en la mejilla.
¿Cómo se pudo permitir este dirigente hacer todo lo que hizo? El que agunos hombres en posiciones de poder exhiban comportamientos libidinosos y machistas hacia las mujeres tiene que ver con su socialización desde la niñez. En las culturas hispanoamericanas se fomenta una idea de masculinidad que enfatiza la dominación, la agresividad y la expresión sexual irrespetuosa. Como decía la representante de ONU Mujeres en Uruguay a CNN en Español, Magdalena Furtado, en 2022: “Ser hijo, hermano, novio, marido no exime a ningún hombre de tener asumidas comportamientos machistas. Porque las conductas machistas son producto, son resultado de las normas sociales o los estereotipos que hay en la sociedad. ¿Y qué quiere decir esto? Quiere decir que una sociedad por cultura, por tradición, por normalizar ciertos comportamientos, le va asignando roles, le va asignando permisos, derechos y prohibiciones distintas a los hombres y las mujeres”.
Cuando alguien ocupa una posición de poder en nuestras sociedades hay ocasiones en que esa persona se siente con la autoridad para actuar de manera abusiva. En algunos casos, además, los hombres en situaciones de poder creen que están por encima de las leyes o normas sociales debido a su estatus. Esta sensación de impunidad los lleva a actuar de forma irresponsable.
Rubiales sigue siendo presidente de la Federación porque se ha negado a dimitir, a pesar de las fuertes presiones. Mientras tanto, declara que el beso fue "espontáneo, mutuo, eufórico y consentido", cosa que Jennifer Hermoso contradice. En su comunicado del pasado 25 de agosto la futbolista dice que se sintió “vulnerable y víctima de una agresión” en un acto causado por Rubiales que fue “impulsivo”, “machista”, “fuera de lugar”y “sin haber tenido consentimiento alguno”. "Sencillamente, no fui respetada", añadió. El comunicado de Hermoso fue clave para que la Fiscalía de la Audiencia Nacional abriera diligencias de investigación, que se han completado en este momento la misma jugadora ya presentó una denuncia expresa contra Rubiales en la sede de la Fiscalía General del Estado.
A consecuencia de sus acciones Luis Rubiales fue suspendido por la FIFA por noventa días mientras que la RFEF sigue dando pasos contra él, suspendendiéndole el empleo y el sueldo, además de retirándole el vehículo oficial, la computadora y el teléfono móvil. Mientras tanto, la RFEF también invitó al seleccionador nacional femenino, Jorge Vilda, a separarse. Se deduce de todo esto y de los reclamos que venían haciendo las jugadoras, que la cultura de la organización toleraba comportamientos inapropiados. Por el momento, Vilda ha sido reemplazado por Montse Tomé, la segunda de a bordo y quien se vuelve la primera entrenadora mujer de la selección nacional femenina. El asunto también ensombrece la posibilidad de que la FIFA conceda la sede de la Copa Mundial masculina de 2030 a España, que está en una candidatura conjunta con Portugal y Marruecos.
Hasta ahora individuos como Rubiales habían sentido que podía salirse con la suya y continuar comportándose de manera inaceptable, pero en esta ocasión la presión de la sociedad, de los grupos feministas organizados, de los medios de comunicación, de las federaciones deportivas e inclusive del mismo gobierno español ha mostrado que ya en España no se pueda normalizar el comportamiento sexista ni se pueden minimizar las denuncias de acoso o abuso.
Muchas voces respaldaron a Rubiales, especialmente en su pueblo de Motril, en Granada, en donde su madre se declaró en huelga de hambre y se encerró en una iglesia declarando que lo hacía por la “cacería injustificada, inhumana y sanguinaria” que se estaba haciendo con su hijo. Una de sus vecinas inclusive declaró “Estamos hablando de un piquito, no mató a nadie”.
Mientras tanto, el episodio ha sido considerado por los diarios del mundo como un momento decisivo en el movimiento feminista de España, porque muestra una clivaje entre las tradiciones machistas del país y el progresismo más reciente. La periodista Ashifa Kassam del periódico The Guardian de Londres titula así su artículo del 29 de agosto ‘Un besito’: la multitud que apoya a Luis Rubiales se ha visto eclipsada por el impulso feminista mundial por el cambio” y se refiere al episodio como un “punto de inflexión” para España en su cambio de cultura hacia una sociedad igualitaria.
En el New York Times, los autores Horowitz y Chandler entrevistan a una académica de la Universidad Autónoma de Madrid, Mariam Martínez-Bascuñán, quien afirma que en los ultimos veinte años España ha sido una pionera en legislacion sobre género e igualdad y hace ver que en realida la mayoría de españoles entienden porqué el beso de Luis Rubiales fue inapropiado. Los periodistas dicen que el mismo establishment de España está tomando partido al constatar que los políticos más prominentes de izquierda y derecha, las figuras más importantes de la cultura e inclusive voces dentro la cultura machista del fútbol español se han puesto del lado de la futbolista Hermoso. Los periodistas, en su artículo “Un beso forzado y un enfrentamiento con el sexismo en España” de agosto 28 de 2023, demuestran que “España está a la vanguardia de Europa en cuestiones de feminismo e igualdad”.
Como hemos visto, el incidente del beso no consentido, ha desencadenado un importante debate en la sociedad española y en el mundo entero. Este evento refleja un cambio sustantivo en la forma en que las sociedades están evolucionando en su enfoque hacia el comportamiento inapropiado de los hombres hacia las mujeres. La reacción de la Ministra de Igualdad de España y la posterior apertura de una investigación judicial muestran que ya no se puede tolerar ni normalizar el comportamiento sexista.
Las decisiones tomadas por las organizaciones de fútbol, la FIFA y la RFEF, por oto lado, impulsan cambios significativos en la cultura machista en donde las instituciones deportivas tienen un papel fundamental en el combate contra el sexismo y en la promoción de una cultura de igualdad de género. En suma, el respaldo que ha recibido Hermoso de figuras destacadas de la política, la cultura y el fútbol es una evidencia de que el movimiento feminista ha logrado lo que se propuso: desafar a las tradiciones machistas arraigadas en ese país. Este episodio marca un antes y un despué en la lucha por la igualdad de género en España y es un ejemplo para el mundo en la transformación de la cultura hacia sociedades más igualitarias, saludables y cohesionadas.