Al contrastar el diagnóstico prenatal versus el postnatal, reconociendo sus beneficios, existen algunos dilemas éticos, morales y religiosos que los engloban. El postnatal identifica menor número de enfermedades (1/15 mil nacidos) que el prenatal (1/527 nacidos), debiéndose planificar por lo tanto los dos. Ambos, en algún momento, se enfrentan directamente a las decisiones reproductivas de las parejas con afectados o de los afectados.
Cuando una mujer recibe un diagnóstico prenatal patológico y opta por una interrupción de embarazo, lo hace aun en forma clandestina, con lo cual no se soluciona el problema del aborto en sí. Las estadísticas muestran que despenalizado el aborto, este no se incrementa. Con el aborto penalizado, lo que aumenta es la mortalidad y las secuelas maternas por mala atención.
En suma, cubrimos las conciencias antiaborto, por un lado, y por otro abrimos un problema de salud pública materna, sin atacar su esencia: los problemas malformativos y el derecho de las madres a decidir cuándo y cuántos hijos tener. Las leyes ecuatorianas, erradamente, no contemplan esta opción que reclaman las mujeres.
El tamizaje neonatal es importantísimo, pero solo orientará a tratamientos y controles futuros, y puede desembocar en deserción de tratamientos (la estadística es de 70%) con resultados catastróficos para los pacientes, las familias y la sociedad.
Los médicos, al no contar con respaldo legal para enfrentar las demandas maternas, ocultan a sus pacientes la opción del examen prenatal por su trasfondo. La sociedad, a través de esta injusticia, empuja a las madres al aborto clandestino, inseguro e incluso a suicidios.
El personal de salud preparado para atender las discapacidades de origen prenatal o neonatal, debería conocer y brindar la consejería genética a padres, parejas o pacientes. La técnica recomienda planificar los embarazos mediante uso de anticonceptivos, inseminación artificial, fertilización in vitro e interrupción del embarazo; esta última posibilidad, generalmente se omite.
El diagnóstico prenatal es la verdadera manera de enfrentar problemas discapacitantes de origen genético que en el Ecuador son el 30%. El tamizaje postnatal solo aumentará el número de pacientes, y aunque estas familias reciban la bonificación “Joaquín Gallegos Lara”, que alivianará el peso de la enfermedad, no estaremos apuntando al fondo y a la esencia de la prevención, que es lo prenatal. Impulsar el prenatal modernizará los criterios asistenciales y de salud públi