Esta es la pregunta que se la hacen a diario los ciudadanos residentes en la capital de los ecuatorianos. Existen varias aristas desde las cuáles se debe analizar el problema de movilidad que aqueja la ciudad, por una parte, está la falta de planificación referente al arreglo de calles, mismo que provoca congestión vehicular ya no solo a horas pico, sino también en todas las horas del día, a esto se le suma la desinformación que se tiene al momento de escoger una ruta.
Por otro lado, está la inseguridad que se ha agravado en los últimos tiempos, generando desconfianza en los usuarios de transporte público. El clima y condiciones atmosféricas también han contribuido a elevar el tránsito y congestión vehicular, aumentando significativamente el número de accidentes en diferentes avenidas de la ciudad.
Nos encontramos actualmente en una transición de gobernanza y cambio de autoridades en el Cabildo, por el momento reina la incertidumbre, y no se entiende cuál es el afán de arreglar calles y avenidas al apuro. El realizar trabajos de gran envergadura en Quito, hace que movilizarse en la ciudad sea un verdadero reto. La falta de comunicación y planificación para realizar estas obras, han hecho que Quito se encuentre en un caos de congestión vehicular. Si bien, es importante realizar el mantenimiento de las calles y avenidas en mal estado, por otro lado, está el análisis temporal de las obras, esto es, realizar paulatinamente el arreglo progresivo de las avenidas en mal estado, brindando alternativas de movilidad a los usuarios, más no hacerlo todo al mismo tiempo.
En este momento es importante reflexionar que es lo más conveniente para la ciudad: arreglos acelerados y con poca alternativa de movilidad, o una planificación a largo tiempo que permita de manera ordenada ir haciendo los arreglos respectivos. La segunda opción es lo más coherente desde el punto de vista técnico, ya que permite planificar rutas alternas, evitando de esta manera la congestión vehicular, realizar contra flujos ordenados y mantener mayor seguridad vial.
Las condiciones climáticas son un agravante en temas de movilidad, aumentando el número de accidentes de tránsito en las principales arterias periféricas que tiene la ciudad, de esta manera, la congestión vehicular ha aumentado. Quito no tiene muchas opciones para alternar rutas, por tal motivo un bloqueo de una vía principal recae en congestión vehicular a gran escala.
¿Que se ha hecho para atacar directamente a esta problemática? No existe información referente al cierre de calles y avenidas por mantenimiento, no existe un plan de contingencia para elegir rutas paralelas, no se conoce el tiempo que durarán los arreglos por tramo, no se conoce cuáles serán las siguientes vías en cerrarse por arreglos, o a su vez es muy limitada la información que llega al usuario.
La planificación y comunicación eficiente debe ser el eje principal en el cual gira la solución para el incremento de congestión vehicular en Quito. Tarea para la siguiente administración, ya que por el momento los problemas seguirán hasta que se decida cambiar el esquema de trabajos.