¿Alguna vez se han preguntado qué constituye el presupuesto público para un país y cuál es su objetivo? Vamos a entender un poco su importancia. Antes que nada, el presupuesto es la actividad financiera del Estado, ninguna acción del Gobierno se materializa sin presupuesto. Es necesario que el Régimen disponga de dinero para cubrir los gastos relacionados con sus actividades, las cuales se encuentran dentro de lo que se denomina el Plan Nacional de Desarrollo.
El presupuesto público surgió como un instrumento de planificación en Inglaterra en torno a 1822. En ese momento, el liberalismo económico estaba en pleno desarrollo y había una fuerte conciencia popular contra el crecimiento del gasto público. Con eso, en su inicio, el presupuesto ejercía control político sobre los agentes ejecutivos del Estado, con el fin de mantener el equilibrio financiero y evitar, en la medida de lo posible, la expansión del gasto público y colocar las cuentas deficitarias y por lo tanto debilitar a los Gobiernos en lo político.
Se requiere cubrir los gastos en los ámbitos de la salud, educación, seguridad, así como mantener y mejorar la infraestructura que dispone el país, contratar nuevos profesores y médicos, porque la población siempre esta en aumento y debe atenderse de forma prioritaria todo ese sinnúmero de gastos que se encuentran en la ley y en los planes de cada uno de los sectores y niveles de gobierno. Ese dinero viene, en gran parte, de los impuestos pagados por la población y por las empresas. En el momento en que alguien paga un impuesto, tasa o contribución, de manera automática realiza un deposito en la “cuenta bancaria” del Gobierno Central, llamada Cuenta Única del Tesoro Nacional, en la cual las cantidades depositadas serán utilizadas por el Régimen para cubrir dichos gastos.
Los impuestos son variados y entre los más importantes están el impuesto a la renta y el impuesto al valor agregado; además, existen otros niveles de gobierno que financian a los municipios, como el impuesto a la propiedad, que son los municipales. También se financia el presupuesto con contribuciones y es apoyado por los ingresos fiscales por venta de petróleo, gas y otros productos que las empresas publicas procesan y que son consumidos tanto en lo interno como en lo externo. Los gastos de gobierno pueden ser financiados por otros tipos de ingresos fiscales, como préstamos, emisión de bonos y refinanciamiento de deuda, así como por donaciones de los organismos internacionales o de países amigos.
Todos los años el Ejecutivo debe elaborar un documento que prevé en detalle los ingresos disponibles y los gastos e inversiones previstos para ese período, con una excepción, que se produce cuando hay cambio de Gobierno y que la ley manifiesta que se trabajará con el presupuesto de año anterior como prorrogado. Este documento se denomina el presupuesto público, al cual el Diccionario de la Lengua Española lo define como la acción de formar el computo de ingresos y gastos, que son el resultado de un negocio público o privado.
En Ecuador podemos considerar que el presupuesto es un proceso continuo, dinámico y flexible y que es la fotografía de lo que quiere hacer el Gobierno en ese período. En el marco de las políticas públicas se entiende que el presupuesto público trasluce la tendencia política del Gobierno, lo sectores que quiere potencializar y los que quiere afectar, también manifiesta la voluntad política de llevar adelante o no las políticas gubernamentales.
Lo que debe estar claro es que el dueño del presupuesto es la sociedad, la cual encarga a sus gobernantes para que hagan buen uso de sus recursos en beneficio del país.