El año está próximo a concluir, y, a pesar de ello, los hogares no sentimos que el peso que cargamos disminuye, sino que debido a problemas fuera de nuestro control, ahora nuestros hombros cargan más de lo que deberían.
Estuve tentado a hacer “una nota más” sobre la crisis energética y sus impactos, pero este espacio es distinto. Aquí vamos a explorar juntos esos sonidos mágicos que nos permiten viajar en la mente, que nos traen alegría o tristeza y que nos llenan de energía… ¡la música!
La música tiene un poder increíble: nos levanta, nos transporta y, a veces, logra hacernos sentir invencibles. En medio de apagones y días oscuros, cuando el cansancio y la frustración parecen ganarnos, es el momento perfecto para darle volumen a nuestras canciones favoritas y dejar que nos recarguen. Porque, panas, la energía que la música nos da es capaz de hacer que las adversidades pesen un poco menos.
Además, ¿sabían que la música tiene un impacto directo en el cerebro? Escuchar música activa el sistema de recompensa liberando dopamina, la llamada “hormona de la felicidad”. Esta es la razón por la que una canción puede hacernos sentir tan bien.
Un recurso que tenemos al alcance de un botón y que, sin duda, nos ayuda a enfrentar el día con más energía.
Y no solo eso, la música tiene la capacidad de mejorar nuestra concentración y memoria. Al escuchar una melodía, varias áreas del cerebro se activan simultáneamente, incluyendo aquellas relacionadas con el aprendizaje. Según estudios, escuchar música antes de una tarea compleja mejora el rendimiento, ya que prepara la mente y ayuda a mantener el enfoque.
La música también tiene el poder de unirnos, recordándonos que no estamos solos. Cuando compartimos una canción, nos conectamos emocionalmente con otros, generando una especie de “sintonía” colectiva que fortalece los lazos entre las personas.
Incluso, ciertos ritmos pueden sincronizarse con nuestro pulso y respiración. Una canción que amamos puede calmarnos o elevar nuestra energía, según su ritmo. Este fenómeno, llamado "sincronización rítmica”, tiene efectos terapéuticos comprobados que reducen el estrés y mejoran el ánimo.
Así que, panas, por favor tómense una pausa para su salud mental, pongan esa canción que les produce una enigmática reacción en su corazón y sean ustedes quienes encienden la luz que los motiva a seguir. ¡Hasta la próxima!